LA MUSA

CAPÍTULO UNO

🖤🐲🖤

(SANGRE DE DRAGÓN)

El vidrio es frágil, se rompe con facilidad.

El sonido sordo que provoco al chocar contra la pared hizo que temblará cuál gelatina, su agresividad ya le causaban ataques de pánico,  su integridad física dependía del humor de aquella mujer, los golpes, insultos, y ataques de celos, eran su rutina diaria. Solía convencerse así mismo de que todo lo que estaba sucediendo era normal, y que incluso seguía amandola, pero en estos momentos estaba tratando de razonar al respecto, ¿seguía amandola?.

🐲 [...] 🐲

Un frío inexplicable recorrió su columna vertebral, le causo incomodidad, se dio la vuelta, la cama era algo estrecha por lo que no tenía tanta movilidad, su omega extrañaba un poco el aroma de su alfa, pero se negaba a volver a "la casa del horror", donde vivió tantos momentos, buenos y malos. Una sensación de debilidad lo invadió era sencillamente horrible, era cómo volver a ahogarse en sangre de dragón, el que tanto lo atormento, y que gracias a su mejor amigo, ya no creería volver a ver jamás.

Sólo era eso, un simple y amargo recuerdo.

Se removió en la cama buscando la manera de conciliar el sueño, pero era inútil, simplemente su piel recordaba cada golpe, que algunos de ellos seguían presentes, cómo marcas que no podrían borrarse. Se levantó de la cama, estiro sus brazos hacía arriba, tratando de que todo el cansacio se fuera de su cuerpo, era simplemente una sensación que detestaba. Camino a su escritorio, sintiéndose nostálgico debido a que recordaba las noches de su adolescencia, cuando se despertaba a jugar videojuegos en plena madrugada, solo para conseguir ser el mejor.

Desbloqueo su ordenador que se encontraba en el mueble, sin pensarlo con demasía abrió el archivo que había dejado hace unas horas. Escribió lo qué venía a su mente, agradecía que en el tiempo en el que estuvo atrapado en esa casa, desarrollo al máximo su hobbie y su pasión por escribir, le parecía algo increíble cómo podía plasmar su imaginación a base de letras.

En esta ocasión haría algo diferente, escribía novelas eroticas, tomaba inspiración de otras obras de ese mismo estilo, era algo que le interesaba, muy pocas veces en su adolescencia desarrollo sus instintos cómo omega, se negaba a aceptar su debilidad biológica. Hasta que llegó ella y lo obligó a aceptarlo, aceptar que era más débil, y su papel cómo la última jerarquía.

Escribía tal cuál sus pensamientos, la historia de un valiente caballero custodiado por un dragón feroz que en cualquier momento lo devorará, aún no tenía idea de que sucedería después.

Era invierno, esa noche había caído una intensa tormenta de nieve, la calefacción estaba encendida, de manera que no tenía frío. Al poco tiempo sus ojos comenzaron a picar debido a el cansacio, y a la constante exposición a la luz azul de la pantalla de su ordenador. Colocó sus lentes y continuó.

Lo que restaba de la noche.

🐲 [...] 🐲

Despertó de golpe al escuchar su teléfono sonar, todavía no se acostumbraba a tenerlo siempre cerca, pues estando privado de su libertad, no se le permitía tener uno. Al ver la pantalla, trató de recomponer su postura, y deslizó su dedo sobre la pantalla.

— ¿Hola?. —

— Hola, Kazuto, me alegra escucharte muchacho, ¿cómo has estado?. — dijo el beta detrás de la línea.

— Bien, supongo. — contesto un poco inseguro de su respuesta.

— Te tengo excelentes noticias. Mi jefa está encantada con tu trabajo, pero necesita verte, fue una petición bastante extraña, si me permites decírtelo. ¿Crees que puedas venir?, sólo será un momento. — el omega casi se ahoga con su saliva, ¿salir? — Sé que es complicado para ti, por... todo lo que sucedio, pero te lo pido, por favor. Haz el intento, ¿sí?. —