Después de transmigrar, me convertí en el favorito del imperio

Capítulo 82

Wei Yan está celoso.

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Zhuo Ye terminó de escribir su última respuesta unos minutos antes de irse a la cama. Bostezó y se frotó las manos doloridas. Sin demora, se lavó y se fue a la cama.

Su Qiansui, que estaba a punto de decirle que durmiera, no pudo evitar sonreír cuando vio esto. Después de lavarse, lo ayudó a ponerse su pijama blanco esponjoso y lo cubrió con una colcha, "Buenas noches, Ye Ye".

"Buenas noches, mamá". Zhuo Ye Cerró los párpados adormilado, abrazó una esquina de la colcha y cerró los ojos.

Justo cuando la puerta de la habitación se cerró, volvió a abrir los ojos y tomó en sus brazos al gato que buscaba un lugar para dormir al lado de su cama.

El gato que fue abrazado repentinamente estaba tan sorprendido que sus ojos se agrandaron. Las cuatro patas intentaron escapar con todas sus fuerzas, pero Zhuo Ye lo abrazó contra la colcha más rápido.

"¿Estás infeliz hoy porque acepté cartas de amor de otras personas?", Zhuo Ye frotó la cabeza de Maomao y, con solo una frase, él dejó de luchar instantáneamente.

Maomao miró sorprendido, sin esperar que Zhuo Ye preguntara esto de repente.

¿Zhuo Ye recordó algo?

Zhuo Ye lo miró divertido, "Cuando escribí una respuesta, si fuera demasiado larga, te darías una palmada en la cola con enojo. Si escribiera una respuesta breve, tu actitud sería un poco mejor".

Zhuo Ye tiene la costumbre de observar las emociones de las demás personas, es muy sensible a las actitudes de otros.

Pero no esperaba que los gatos pudieran ser animales tan humanos e inteligentes.

Era la primera vez que criaba un gato, lo que le abrió los ojos.

Maomao no esperaba que esas actividades celosas en su corazón fueran expuestas directamente por Zhuo Ye. Primero enderezó su cuerpo y luego se sumergió en la suave colcha sin amor.

Si tuviera que usar la misma palabra para describirlo en este momento, sólo sería 'humillado y enojado'.

Zhuo Ye no pudo evitar reírse cuando lo vio sacando su trasero peludo y metiéndose debajo de la colcha. Lo abrazó con ambas manos y le dijo: "¿Dormirás conmigo hoy? Eres mi gato, mucho más importante que toda esa hete que no conozco."

Aunque Maomao se aferra a él, él no sabe por qué, pero se niega a dormir en la misma colcha con él. En el pasado, cada vez que quería traer a Maomao, corría lejos enojado.

Es solo que esta vez tuvo una actitud dura y el gato se negó a estirar sus garras para lastimarlo, por lo que tuvo que abrazarlo, con dos garras carnosas presionadas contra el rostro de Zhuo Ye, impidiéndole besarlo.

Cuando Zhuo Ye se quedó dormido, el gato retrajo lentamente sus patas, se movió poco a poco en los brazos de Zhuo Ye y encontró una posición cómoda para acostarse.

¡Quieres abrazarme tú mismo, no a mí!

Maomao dijo en voz alta en su corazón, levantó la cabeza y la empujó sobre el cuello de Zhuo Ye, y luego cerró los ojos.

Pero pronto, una figura sombría apareció en la habitación, fragmentos dorados de luz se iluminaron y un largo cabello como una nube cayó sobre sus hombros y quedó pintado sobre la suave cama blanca.

"Mentiroso", se quejó la voz clara y melodiosa del hombre: "Dices que soy más importante que alguien que no conoces. ¿Dónde aprendiste estas dulces palabras para convencerme?"

Las yemas de los dedos tocaron la frente de Zhuo Ye con molestia, sin mostrar malicia real. Estaba empujando y tratando de pellizcar su cara.

Pero su mano atravesó a Zhuo Ye fácilmente y realmente no podía tocar a Zhuo Ye en absoluto.

Después de mirar su palma por un momento, rápidamente la retiró, se sentó en el borde de la cama de espaldas a Zhuo Ye y dijo en un tono relajado: "Por cierto, ¿Con qué tipo de persona planeas estar en esta vida?"

Zhuo Ye, naturalmente, no podía responderle, solo lo escuché murmurar para sí mismo: "Creo que el segundo príncipe del imperio está bien. Tiene los mismos pasatiempos que tú y no es malo, igualmente es peor que yo..."

"El chico de la familia Feng se muestra algo reacio, su personalidad es débil, pero si no es una mala persona puede pasar la prueba a regañadientes. Tampoco es tan bueno como yo..."