Dafne se encontraba sentada en el salón de clase, anotando todo lo que estaba en el pizarrón, afuera el día estaba nublado, parecía que en cualquier momento se iba a largar la lluvia. La clase parecía eterna, a diferencia de la clase de folklore, esta era aburrida y cada momento en ahi se sentía como si te quitara la vitalidad.
Cerrando los ojos trato de imaginar que estaba con sus compañeros del ballet, llevando el hermoso vestuario rojo con el que se sentía tan bien. Quería que el tiempo pasara más rápido para poder regresar a la asociación de fomento y asi poder bailar esas canciones que le alegraban el alma.
Después de horas la clase llego a su fin y la chica salió con la capucha del buzo puesta debido a que había empezado a llover, al principio era una lluvia finita, pero después de unos minutos paso a ser una lluvia más abundante. Las calles de Libertad se habían empapado, reflejando el cielo en los caminos de cemento. Estando en la esquina de la plaza empezó a sentir esa preocupación que era habitual en ella, temía cada vez que tenia que cruzar esa calle que se veía tan larga, tenia que estar atenta al semáforo y a las esquinas de donde tambien salían autos.
Cuando el semáforo se puso roja para los vehículos avanzo con rapidez, sintiendo como las gotas de lluvia le empapaban las piernas, por suerte no hubo un accidente como ella esperaba, pero algo más había pasado y era que su colectivo estaba frenado en la parada, todavía estaba un poco lejos, dudaba en si correr para alcanzarlo o dejarlo ir, pero no tampoco quería esperar mucho tiempo bajo la lluvia, por lo que se dejo llevar por la adrenalina y corrio lo más rápido que pudo, llegando a alcanzar el transporte el cual abrió la puerta para dejarla subir. Luego de pagar su boleto se metió entre la gente y se sostuvo como pudo. El colectivo freno en la siguiente estación y dejo subir a más pasajeros, cada vez había menos espacio para moverse con libertad. El colectivo acelero de golpe sin darle tiempo a los que recién subieron de acomodarse. Dafne se agarro con fuerza del poste, sintiendo una mano cálida que la sujetaba con fuerza justo de la mano con la que se estaba sosteniendo. La persona que la había agarrado se disculpo enseguida, pero antes de responder la chica levanto la mirada para verla.
Dafne: ¿Profe? _dijo sorprendida al verlo a su lado_
Damian: ¿Dafne? _respondió igual de sorprendido y sonrio alegremente_ ¡Hola! Disculpa lo de recién, pero si no me agarraba me iba al piso _dijo apenado_
Dafne: No pasa nada _sonrio por la emoción y sintió el calor en su cara_ No esperaba que nos encontráramos _soltó una risita nerviosa_
Damian: Yo tampoco, no estoy muy acostumbrado a encontrarme a mis alumnos. Salvo Raquel y Antonio que los veo siempre que voy a comprar _dijo con su voz alegre_
Dafne: Es que ellos viven ahi nomas _dijo con una sonrisa timida_
Damian: ¿Venís de estudiar? _pregunto con curiosidad para sacar conversación_
Dafne: Si, pensaba que no iba a salir nunca de ahi _dijo soltando un gran suspiro_
Damian: A mi nunca me gusto estudiar, me acuerdo que en la secundaria siempre me llevaba materias.
Dafne: ¿Te costaba estudiar?
Damian: No me gustaba y no lo hacia, hasta que me di cuenta que si no estudiaba iba a terminar abajo de un puente.
Dafne: ¿Y por qué quisiste ser profesor de baile? _lo miro curiosa_
Damian: Desde chico que me gusta el folklore, a veces bailaba escondido en mi habitación. Ya de grande tenia dos opciones, o me iba a estudiar el profesorado de baile o me iba con mi papá a trabajar con mi papá a la obra, de las dos elegí la que senté que me iba a hacer más feliz. ¿Y vos por qué quisiste empezar a bailar?
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Dafne
RomanceLa vida de Dafne da un giro de 180 grados tras asistir a la fiesta del 25 de Mayo, en donde se encontró con un chico de gran belleza que la cautivo con su baile. Es asi que comienza a asistir a las clases de folklore, descubriendo que aquel chico e...