Prólogo

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 En el hospital Valley de Miami todo era normal. Doctores de aquí para allá. Enfermeras saliendo y entrando de las habitaciones. Teléfonos sonando y secretarias atendiéndolos. Una sala de espera muy bonita, con sus típicas plantas y revistas en la mesa. Los mismos sillones blancos de todos los hospitales y gente sentada en estos esperando respuestas.

Algunas personas lloraban por la pérdida de algún familiar. Otras sonreían por la recuperación de un amigo. Matrimonios abrazados con los resultados del test de embarazo de la mujer que seguramente, había salido positivo.

A medida que avanzabas por los pasillos, te encontrabas con las habitaciones para los pacientes, la cafetería, los ascensores y una que otra sala de espera adicional.

El hospital Valley de Miami tenía 3 departamentos: el departamento de pruebas, el departamento de emergencias y el departamento de psicología.

El departamento de psicología era el último de todos y el menos concurrido. Tenía una sala de espera y un mesón de servicio. También estaban las salas de psicología, donde atendían a personas que padecían algún tipo de trastorno, como la depresión.

Un poco más allá se encontraba el área de internados, o ''área de locos'', como solían llamarla en Miami.

En el ''área de locos'' se encontraba Lauren Jauregui. Esta chica pálida y de fulminantes ojos verdes había sido internada luego de que la depresión la invadiera de nuevo y ella intentara suicidarse.

Había estado viviendo con ella cuatro años.

Lauren había visitado a todo tipo de especialistas. Desde neurólogos hasta psiquiatras. Le diagnosticaron depresión a los quince, luego de que sus padres notaran los cortes en sus muñecas.

A pesar de todos los medicamentos, las visitas al médico y el apoyo moral de su familia, la depresión volvió a atacar y Lauren debió volver al hospital, siendo internada.

Al principio, no comía, ni hablaba, solo dormía y se despertaba para ir al baño.

Ahora, un año después, Lauren comía, y cuando debía hablar, se limitaba a pronunciar monosílabos.

Sin embargo, ella no estaba bien.

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