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Aquí yacen los eventos de esta historia, en toda su intensidad, para aquellos que aún guardan dudas o buscan respuestas sobre el incierto rumbo de este proyecto de vida, profundamente transformado. 


Aquí se encuentra la esencia de esta historia, un capítulo donde se concentra la totalidad de sus misterios.

Aquí yacen los primeros indicios de fisuras en la identidad de nuestros héroes, y los delicados destellos de amor que emergen en sus almas intrépidas. También aquí, la Liga comienza a tejerse en sus destinos, convirtiéndose en una parte inevitable de sus nuevos "yo".


Aquí yace el comienzo y la continuación de un relato incesante, cargado de hechos y circunstancias que envuelven a nuestros protagonistas.


Aquí yace...


Aquel día, el doctor de turno no sospechaba de la tragedia que el destino traería a su hospital. Aquella tarde del 21 de julio marcaría el inicio y el final de una vida despojada de paz.

—¡Doctor Ishimizu! Dos jóvenes de 16 y 17 años, aspirantes a héroes de la Academia U.A., acaban de ser internados. ¡Endeavor solicita su presencia con urgencia!

Mientras, en los fríos pasillos del hospital, una marea de periodistas invadía las puertas de emergencia, y en medio del caos, unos ojos de ébano se cruzaron con la mirada aterrada de un niño que, con manos temblorosas, se aferraba a la palma fría de su héroe, intentando darle algo de calor.

Los adolescentes esperaban en el pasillo, uno junto al otro, siendo rápidamente atendidos. Sin embargo, la mayoría de los quirófanos estaban ocupados, y solo podían realizarse intervenciones básicas en el lugar.

El joven rubio permanecía inconsciente, aunque su memoria muscular respondía de manera involuntaria, retorciéndose en la camilla mientras las enfermeras intentaban prepararlo para la cirugía. Sus oídos sangraban lentamente, su piel porcelana se tornaba cada vez más pálida, y la hemorragia estomacal sumada a las laceraciones en su espalda, pecho, piernas, y probablemente costillas, presagiaba un cuadro crítico.


En la camilla contigua, Endeavor se encontraba de pie junto a su hijo menor, observando cómo los médicos se apresuraban en su labor. A pesar de su poder y posición, se sentía impotente. De nada le servía ser el héroe número uno si su hijo estaba sumido en el dolor, vomitando sangre, agarrándose la cabeza en un intento de soportar la conmoción. La única acción que podía hacer era tomar su mano, apoyarlo emocionalmente, mientras confiaba en que el doctor haría su trabajo.


El doctor ordenó que los prepararan para una intervención urgente. Como único responsable de los jóvenes, decidió operar en una sala doble en cuanto quedó libre una.


—¡Cada minuto cuenta! ¡Escuchen, equipo, esto es crítico! Tenemos a Bakugou Katsuki y Todoroki Shouto en estado grave. Ambos han sufrido daños severos en batalla, y vamos a manejarlos simultáneamente. La prioridad es estabilizar sus signos vitales para no perderlos.Uno de los internos, a cargo de leer los diagnósticos, estaba a la derecha del doctor.

—Bakugou: laceraciones profundas en ambos oídos, con tejido auditivo severamente dañado, pérdida de audición y posible compromiso del equilibrio. Sangrado profuso y daños en los nervios auditivos. Además, diversas contusiones y fracturas múltiples.

—De acuerdo, sangrado masivo. Procederemos de inmediato —ordenó el doctor—. Enfermera Kao, necesito pinzas hemostáticas y gasas. Controlen el sangrado de inmediato; si no lo logramos por medios tradicionales, recurriremos a la electro-cauterización.El doctor dejó a Bakugou en manos de la enfermera y se movió rápidamente al lado de Todoroki, dando instrucciones a los internos más avanzados.

Sordo mudo amor - Todobaku evil verseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora