One Shots BTS - Male and Fem reade

Suga - //Accidente y ¿cita?//

Suga - //Accidente y ¿cita?// 

(Fem Reade)

Me encontraba de camino a mi casa, el día estaba nublado, casi parecía que iba a caer una fuerte lluvia. Todo el día he estado con una sensación extraña, como si fuera a pasar algo malo; no entendía por qué se me removía el estomago a cada minuto del día, desde que me levanté de mi cama hasta ahora.

Hoy tenía que ir a trabajar, y a trabajar me refiero a cantar en la calle. Solo soy una estudiante, aun no puedo conseguir empleo, todos me dicen que no tengo la edad, porque soy mujer o porque no necesitan a nadie. La única opción que me quedaba era surgir en la calle.

Esa era la única manera de conseguir dinero para mantenerme, ya que mi mamá no le alcanza con el dinero que gana en su trabajo, así que decidí estudiar y trabajar a la vez; quiero ayudarla, ella es lo único que me queda.

Seguí caminando hasta llegar a una calle, no se encontraba mucha gente; y de repente se cruzaron un auto y un repartidor de comida. Ambos chocaron en la intersección que daba a la calle principal.

Asustada, corrí hacía el chico que se encontraba casi abajo del auto, por lo que pude ver la rueda estaba cerca de su cabeza, y eso fue lo que más me preocupaba, no sabía si es que la rueda del auto pudo haberle echo daño.

-Oh por dios!! – Exclamé - ¿Te encuentras bien? – solo emitió un gemido lastimero – no te muevas, llamaré a la ambulancia- tomé mi teléfono y llamé a emergencias suplicando que llegaran rápido al lugar.

Al llegar, sacaron al chico debajo del auto y lo metieron a la ambulancia. La policía me interrogo sobre lo que pasó, cada detalle de lo sucedido. Aquellos oficiales me recomendaron ir a mi casa, que ellos me podían llevar si eso necesitaba, pero solo quería ver lo que le pasó al chico; se veía demasiado lastimado, y eso me generaba una angustia que no comprendía.

Así que, les pedí que me llevaran con él, que quería saber como estaba. Al verme tan insistente aceptaron llevarme con la condición de que le avisaría a mi madre.

Al llegar me topé con la secretaria.

-Hola, disculpe. ¿Me podría decir en que habitación está el chico que llegó hace poco? -.

-Lo lamento, pero no puedo proporcionar información si no es alguien cercano al paciente-.

-Si, lo siento – sonreí un poco – soy su...novia – hablé apresuradamente, intentando recalcar lo más posible la palabra "novia" – por favor, es muy importante para mi saber si está bien – la secretaria accedió, me dijo a habitación y corrí como una desquiciada.

Al estar en frente a la puerta noté que estaba abierta, así que, toqué con mis nudillos intentando llamar su atención. Él al mirarme sentí como un cosquilleo recorrer mi columna, era una sensación que me daba escalofríos; sus ojos fríos me escanearon esperando alguna respuesta de mi parte.

-Lamento si te interrumpo, ¿puedo pasar? – él asintió – gracias.

-¿Tú fuiste quien me ayudó? –

-Si –

- Gracias –

-No tienes porque –

-Mi pregunta es... ¿por qué estas aquí? – su ceño se frunció.

-Es que... - me callé por un momento - ... me preocupe – él me miró esperando a que le explicara de que hablaba – me...preocupe por ti. Es que te vi y solo sentí que debía ayudarte, pero luego de eso... lo único que necesitaba saber es que si tue te encontrabas bien – él seguía mirándome sin ninguna expresión. Carraspeó su garganta preparándose para hablar.

-Gracias... por preocuparte por mí. De verdad te lo agradezco, y también porque si hubiese estado más tiempo bajo del auto hubiera dañado más mi hombro, así que muchas gracias a ti por salvarme-.

-No hay de que-.

Ambos nos miramos sin nada más que decir, la habitación se sumió a un silencio que no era incomodo, pero tampoco era uno amigable.

-¿Puedo hacerte otra pregunta? – su voz interrumpió. Le asentí con la cabeza - ¿Cómo entraste? Por lo que sé, no dejan entrar si no eres alguien cercano al paciente-.

No respondí.

No sabía que decirle.

¿Cómo le digo que me hice pasar por su novia para estar aquí con él?

Me tacharía de loca obviamente.

-¿Y bien? Estoy esperando-.

-Yo...- antes de responder la enfermera a cargo entro -.

-Hola, buenas tardes. Vengo a verificar que todo esté bien con el paciente – me miró y luego miró al chico – lamento tener que decirle que su novia va a tener que esperarla afuera – el me observo como su hubiese descubierto un secreto de hace siglos, sus ojos se fijaron en mi como si no se lo pudiera creer – por favor, espere afuera. Cuando termine la dejaré pasar nuevamente – y con eso me sacó.

Estando afuera me doy cuenta que no se que cara poner cuando la enfermera salga y me deje entrar; me pregunto que podré decirle para justificar el porque había dicho que yo soy su novia. En mi mente ahora solo se crea un escenario, que cuando entre ha ese cuarto me echará a patadas gritando que soy una loca psicópata que ha venido a sacarle las tripas para venderlas al mercado negro.

Oh peor, le dirá a la enfermera que llamé a la policía para que me saqué de aquí diciendo que yo soy una ladrona; y debido a eso me meterán a la cárcel, dejaré a mi madre sola, saldré en las noticias dejando en claro que soy una persona peligrosa de alto riesgo dejándome sin amigos y sola en este asqueroso mundo; y todo eso por una estúpida palabra.

Al ver a la enfermera salir, espero que me diga algo, pero solo me dice que ya puedo pasar a hacerle compañía a mi novio. Eso me dejó más confundida todavía.

Al entrar, me lo encuentro observándome esperando a que le dijera algo, pero no encontraba las palabras adecuadas para romper esa pared de tensión que teníamos. Él al ver que no decía nada, decidió tomar la primera palabra.

-Así que de esa forma entraste – su tono era burlesco.

-....-

-¿Qué? ¿No vas a decir nada? -.

-¿Y que quieres que diga? -.

-Que digas que si -.

-¿Si a qué? -.

-Para que tengamos una cita cuando salga de este horrible hospital -.

-¿Cómo? – exclamé sorprendida.