¿De verdad creéis que pertenecer a la familia de la persona más rica de toda España es un completo camino de rosas? Pues estáis muy equivocados, ser perteneciente a esa familia no es tan bueno como pensáis... tiene sus cosas buenas, pero también tie...
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Mi tía me había encasquetado a mi sobrina (no me malinterpretéis, la quiero mucho, pero no tenía ganas de ver a nadie) y encima Nerea me había citado en una cafetería por el centro de Madrid para hablar conmigo de un tema que desconocía (aunque me olía que el tema se podía referir perfectamente a Ruslana)
Helena (mi sobrina) y yo nos encontrábamos entrando a dicha cafetería y Nerea alzó la mano para que la pudiese diferenciar
Fuimos hacia ella agarradas de la mano y la tuve que soltar para darme un pequeño abrazo con Nerea
- Perdón por traer a mi sobrina, mi tía se tenía que ir a hacer no sé que negocio -dije separándome y sonrió negando restándole importancia
Nos sentamos y le di mi teléfono a Helena para que se pudiese entretener
- Creo que ya sabes de qué quiero hablar contigo -dijo y la miré negando
- La verdad es que no -dije y se pegó al respaldo del asiento
- Escuché lo que la dijiste ayer a Ruslana -dijo sin tapujo alguno y maldije
- Perdón, me salió solo y... cuando me di cuenta ya se lo había soltado -dije intentando arreglarlo
- No estoy enfadada ni mucho menos porque escuché que también la dijiste que no ibas a intentar nada con ella porque estaba conmigo -dijo y fruncí el ceño
- ¿"Estaba"? -pregunté quedándome con esa parte y asintió levemente- ¿Habéis roto? Si ha sido por mi culpa... que sepas que no me lo voy a perdonar nunca, no era mi intención que al soltárselo... se raye y rompa contigo
- Todavía no hemos roto, pero creo que es lo mejor para ella, para mí y para ti -dijo y ladeé la cabeza sin saber a que se refería- ¿Tú crees que si no le interesarías a Ruslana se preocuparía tanto por ti? -me quedé callada- Pongámonos en situación, cuando me llamó para pedirme que la ayudase a limpiar el salón de tu casa mientras tú estabas bajo los efectos de una droga... me pude oler algo que decidí ignorar, pero me di cuenta de que estaba sintiendo algo por ti cuando vi que estaba destrozada cuando tu representante la llamó dándola la noticia de que te había dado una sobredosis
- ¿Estás segura de que quieres romper con ella por una suposición? -pregunté y asintió
- Cuando te des cuenta de como te mira y de como te sonríe... verás que no son suposiciones y de que tengo toda la razón del mundo -dijo y se levantó- Te dejo reflexionar -me dio un beso en la cabeza y se fue
- Yo que tú lo haría -dijo Helena mirándome y la miré confundida- Mamá, siempre me dice que eres una buenísima persona y que tienes mucho amor para dar, pero que también tienes miedo de amar y de ser amada -bajé la mirada- Si lo que ha dicho esa chica es verdad... lo único que puedes hacer es ser feliz de una vez porque te lo mereces
