Flowers from 2020 | Luckity version

capitulo 4

— Y luego se fue — Luzu terminó. Le había contado a Quackity todo sobre su encuentro con su yo futuro, excluyendo las partes sobre la angustia y sus nuevos sentimientos.

Hubo un silencio del otro lado de la línea. Se estiró tanto hasta que Quackity lo rompió con un — Wow...

— Si — respondió Luzu — sé que suena loco pero-

Quackity rió — Lusu, ¿Estás olvidando con quién estás hablando? Literalmente estoy 50 años en el pasado para ti en este momento. No mames.

Luzu rió entre dientes — Supongo que estás en lo correcto.

Otro silencio se hizo cargo.

— ¿Entonces que hacemos ahora?

— Bueno... — Luzu suspiró — no estoy seguro de eso.

— ¿Qué es lo que decía el control? Ya se me olvidó.

— Todo lo que dice es "Llévame a casa".

— ¿Y a dónde vergas se supone que te lleva exactamente?

— No lo sé — dijo Luzu — mi yo futuro no me dijo eso. Todo lo que me dijo fue-... — se detuvo antes de confesar lo que le había estado ocultando a Quackity.

— ¿Fue qué? ¿Que dijo, Lusu?

— ¡Nada! Solo eso... uh.

— Lusu — Quackity llamó — creo saber que me estás escondiendo algo. Vamos, puedes decirme, confías en mí ¿No?

— ¡Si, claro que confío en ti, es solo que ese no es el problema!

— ¿Entonces que carajo es Lusu?

— Es solo que... me dijo que estaba en peligro.

— ¿¡Peligro!? — Quackity entró en pánico — ¿Qué tipo de peligro? ¿Estás bien? Fue un pitbull, ¿Verdad?

— Estoy bien, Quacks, de verdad. Mi yo del futuro dijo que no era ningún tipo de peligro físico.

— ¿Entonces en qué tipo de peligro estás? Estoy pendejo Lusu.

— Bueno... dijo que estoy en peligro de... de qué me rompan el corazón.

Más silencio.

— ¿Qué te rompan el corazón?

— Si.

— ¿Por quién? ¿Qué clase de persona sería capaz de romperle el corazón a una gran persona como tú?

Ahí estaba. Luzu sabía que la pregunta de avecinaba, pero aún así le tomó desprevenido — No dijo exactamente quién era.

— Pero ya sabes, ¿No?

No fue una pregunta. Quackity sabía que Luzu sabía. Esto fue. Sabía que tenía que decírselo a Quackity ahora. Tenía que decírselo o se arrepentiría el resto de su vida, tal como lo había dicho su yo futuro. Así que respiró hondo y le dijo a Quackity la verdad.

— Tú, Quacks. Creo que eres tú...

El silencio se prolongó de nuevo por lo que parecieron horas. Luzu se puso cada vez más nervioso a medida que pasaba el tiempo. ¿Y si Quackity se lo había tomado por el camino equivocado? ¿Y si no quería volver a hablar con Luzu nunca más?

Entonces, Quackity habló.

No dijo mucho, pero significaba mucho para Luzu.

— Yo nunca te lastimaría, Lusu. Sabes que... yo-yo te amo...