Naruto - Danza del espanto

Capítulo 10: Oscurecer los cielos

"¡Molon Labe!"

"¿Puedes explicar lo que significa?"

Es Alto Valyrio. Es una declaración de desafío, que básicamente significa "Ven y tómalos" en términos simples.

"¿A qué te refieres exactamente?"

"Nuestras armas, nuestra libertad."

...

Estaba claro que se avecinaba un conflicto.

Naruto podía verlo en las caras de todos y oírlo en los susurros a medida que se adentraban en el edificio. No era paranoia, aunque algunos pudieran pensar que lo era, sino la simple verdad.

Parece que la guerra está en el horizonte.

Pero nada de eso era relevante ahora.

"¿Es realmente la mejor idea?" Preguntó Alicent, repitiendo lo que había escuchado de su colega.

Naruto le dio un empujoncito y sonrió.

"Estás loco", le dijo Alicent.

Él levantó los dedos y los pellizcó. "Sólo un poco", le dijo en voz baja. Pretendía ser humorístico, pero ella no lo vio así.

"¡No, es ridículo! Es una completa locura", le dijo a su compañero.

Naruto se giró hacia ella y la sujetó de los hombros con suavidad. "Escúchame, amor. Si los hombres no estuvieran hechos para montar dragones, los valyrios no se habrían llevado los huevos que descubrieron. Y estoy bastante seguro de que si alguien que pastoreaba ovejas podía montar un dragón, tú también puedes". le dijo antes de añadir: "En realidad, los dragones no se pueden domesticar, pero se puede establecer un vínculo con ellos y adiestrarlos. Los pastores valyrios fueron los primeros en controlarlos usando magia, y montaron dragones durante milenios antes de la Perdición. No eran Targaryen ni Velaryon".

Alicent se envolvió en su capa con más fuerza.

"¿Y si ninguno de los dragones se une a mí? ¿Entonces qué?", preguntó, enarcando una ceja.

"Entonces te traeré un huevo de la cámara acorazada", respondió él, en tono tranquilizador. "No te preocupes, estarás bien".

Alicent se cruzó de brazos y resopló: "Bien, pero si muero, te perseguiré el resto de tus días. Antes, sin embargo, perseguiré a Rhaenyra por ser una pésima amiga". Le lanzó una mirada mordaz y le golpeó varias veces en el pecho.

El príncipe heredero se echó a reír.

Estaría encantado de aceptarlo.

Cuando ella vaciló, él le dio otro suave empujón para que se moviera, y luego se pusieron en marcha, dirigiéndose juntos a la Fosa de los Dragones.

Así que había decidido regalarle un dragón.

Y no un dragón cualquiera. Si lograba que el gruñón bulto de escamas se levantara y se moviera, estaba seguro de que conquistaría a Alicent. Eran tan parecidos que resultaba casi gracioso. Era un poco tímido cuando estaba fuera de la fosa, pero era astuto cuando estaba cerca de aquellos en los que confiaba. También era el más rápido de los dragones Targaryen. Era más rápido que incluso Meleys cuando se trataba de velocidad pura. Era tan viejo, si no más, que la dragona, pero daba tanto como recibía cuando se trataba de lo que quería hacer.

...si sólo pudiera arreglar una reunión.

Si lograba esto, tal vez podría hacer un milagro con Rhaenyra.

Era lamentablemente inconsciente.

(.0.0.0.)

Mientras Naruto y Alicent se dirigían al Dragonpit, Rhaenyra estaba en otra parte de la fortaleza.