¿Más que mejores amigos?(harron)

12

Hermione y Adhara, ya habían regresado, aunque esta última no se encontraba con ellos en ese momento, Her consideró las cosas de otra manera. Estaba dividida entre el horror ante la idea de Harry vagando por el colegio tres noches seguidas ("¡Si Filch te hubiera atrapado"!) y la desilusión de que finalmente no hubieran descubierto nada nuevo sobre quién era Nicolás Flamel.

Ya casi habían abandonado la esperanza de descubrir a Flamel en un libro de la biblioteca. Una vez que empezaron las clases, volvieron a buscar en los libros durante diez minutos en los recreos. Harry tenía menos tiempo que ellos, porque los entrenamientos de quidditch habían comenzado también.

Los Weasley se quejaban de que Wood se había convertido en un fanático, pero Harry estaba de acuerdo con Wood. Si ganaban el siguiente partido contra Hufflepuff, podrían alcanzar a Slytherin en el campeonato de las casas por primera vez en siete años. Además de que deseaba ganar, Harry descubrió que tenía menos pesadillas cuando estaba cansado por el entrenamiento.

Harry se dirigió directamente a la sala común de Gryffindor, donde encontró a Ron y Hermione jugando al ajedrez. El ajedrez era la única cosa en la que Hermione había perdido, algo que Harry y Ron consideraban muy beneficioso para ella.

-No me hables por un momento, por favor- pidió Ron, cuando Harry se sentó a su lado -Necesito concen..- vió el rostro de su amigo y se preocupó inmediatamente -¿Que te sucede? Tienes una cara terrible-

En tono bajo, para que nadie más lo oyera, Harry les contó sobre el súbito y siniestro deseo de Snape de ser árbitro de quidditch.

-No juegues- le aconsejo de inmediato Hermione

-Diles que estás enfermo- agrego Ron

-Finge que se te rompió una pierna- sugirió Hermione

-Realmente rómpete una pierna- dijo Ron

-No puedo- dijo Harry -No hay buscador suplente. Si no juego, Gryffindor tampoco puede jugar-

En ese momento, Neville se tambaleó y cayó en la sala. Sus piernas estaban pegadas juntas, con lo que reconocieron de inmediato como el maleficio de las piernas unidas.

Todos empezaron a reírse, salvo Hermione, quien se puso de pie y realizó el contramaleficio. Las piernas de Neville se separaron y pudo ponerse de pie, temblando.

-¿Que sucedió?- pregunto Hermione, ayudándolo a sentarse junto a Harry y Ron

-Malfoy- respondió Neville tembloroso -Lo encontré fuera de la biblioteca. Dijo que estaba buscando a alguien para practicar eso-

-¡Ve a hablar con la profesora McGonagall!- le dijo Hermione -¡Denúncialo!-

Neville sacudió la cabeza -No quiero tener más problemas- murmuró

-¡Tienes que hacerle frente, Neville!- dijo Ron -Esta acostumbrado a llevarse a todo el mundo por delante, pero esa no es una razón para tirarse a sus pies y hacerle las cosas más fáciles-

-No es necesario que me digas que no soy lo bastante valiente para pertenecer a Gryffindor, eso ya me lo dice Malfoy- dijo Neville, atragantándose

Harry buscó en los bolsillos de su túnica y sacó una rana de chocolate, la última de la caja que Hermione le había regalado en navidad. Se la dio a Neville, quien pareció a punto de llorar.

-Tu vales por doce Malfoys- dijo Harry -¿Acaso no te eligió para Gryffindor el sombrero seleccionador? ¿Y donde está Malfoy? En la apestosa Slytherin-

Neville dejó escapar una débil sonrisa, mientras desenvolvía el chocolate.

-Gracias, Harry.. creo que me voy a la cama..- dijo Neville mientras se alejaban