Capitulo 1.

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Me desperté exaltada, era ese sueño confuso de nuevo, casi todas las noches sueño con un bonito lago, esta todo tranquilo, todo está cubierto de flores de muchos colores, todo parece tan mágico.

Hasta que entonces, comienzo a escuchar gritos de una mujer, no logro entender muy bien lo que dice, solo puedo escuchar una palabra, en realidad, no es una palabra como tal, sino un nombre. ¿Aarón? Nunca antes he escuchado ese nombre, nadie que conozca se llama así, tampoco he visto ese lago jamás, entonces, ¿Por qué diablos sueño con eso?

Mire de reojo el reloj que marcaba 11:40 am, y de inmediato salí de mis pensamientos.

― ¡Joder, Alisa! ―lo había olvidado, tenía que verme para almorzar con ella, teníamos que charlar de nuestro regreso a clases.

Tan solo faltaban diez días para comenzar mi último año de secundaria, di un salto, saliendo fuera de la cama, para alcanzar mi teléfono de la mesa de noche.

De inmediato marque el número de mi amiga.

― ¡Oh Querida!, lo siento ―me adelante a decir al momento que ella contesto ―Se me ha pasado la hora ―continúe excusándome.

― No es raro de ti, Nadia ―me respondió, parecía enojada ― ¡ME HAS DEJADO PLANTADA DE NUEVO! ―dijo, subiendo la voz.

Bueno, sí, está bien, no era la primera vez que me retrasaba, digamos que me gusta hacerme esperar, pero en mi defensa, Alisa es mi amiga desde hace once años debería de estar acostumbrada ¿No?

― No, no ¿Si quieres, ven a almorzar a mi casa, o vamos a Biko's? ―dije, tratando de resolver mi retraso.

― Mmm... Esa bien, a la una en Biko's, Pero, hey Nadia ¡SE PUNTUAL, POR EL AMOR DE DIOS! ―dijo ella, me pareció muy dramática.

― Claro nena, nos vemos allá al rato ―dije, para luego colgar.

Después de estirarme un rato entre al baño a lavarme los dientes, para luego darme un baño caliente, tome la pasta de dientes de la repisa, le puse un poco a mi cepillo, y me dirigí a colocarlo de nuevo en se lugar cuando...

¡PÚM! ¡ZAS!, una parte de la repisa cayó al suelo, di un salto asustada, sin percatarme de que el piso de mi baño estaba mojado.

Y de un momento a otro me encontraba en el suelo y con la pasta de dientes en mi barbilla, el cepillo después de chocar con mi barbilla callo en el inodoro, "Este va a ser un muy mal día" pensé.

Luego de acomodar el desastre que la repisa había causado, entre a la ducha, y me di un buen baño caliente.

Ya en mi habitación, me dirigí al closet que estaba a lado de la puerta que lleva al baño.

Me decidí, por un suéter turquesa con un Jean negro y para complementarlo me puse mis sarcillos de perlas negras y mis sandalias negras. Me mire al espejo para revisar mi look. Me Gusta", termine de peinarme, como tenía mi cabello húmedo decidí dejarlo suelto, mi cabello es castaño claro y largo.

Termine de arreglarme y baje a saludar a mis padres, deberían de estar ya en casa pues siempre llegaban al medio día de sus trabajos.

Mientras bajaba las escaleras escuche en la sala de estar una voz distinta, una voz de una chica, para nada era la voz de mi mama, "Esa voz solo puede ser de"...

― ¡LUCIA! ―grite atravesando la sala para abrazarla.

― ¡Nena! ―dijo ella emocionada ― ¡Te extrañe mucho! ―continuo diciendo, abrazándome con más fuerza.

No puede evitar que se me salieran unas cuantas lágrimas, Lucia era mi amiga desde que tengo memoria, siempre habíamos sido muy unidas pero desde un año hacia acá nos hemos distanciado un poco.

― ¡Yo Más! ―dije secándome las lágrimas ― ¿Pero qué haces aquí? ¿Viniste sola? ¿Y tus padres cómo están? ¿Y tú como estas? ―inquirí, ansiosa.

― Calma, calma ―dijo ella riéndose, lo cual hizo que riera también ―Vine con mi papa, él está ayudando con unos problemas que tiene la casa, al parecer la madera con la que está construida tiene algunos problemas ―dijo ella, sentándose en el sofá.

No pude evitar pensar en lo ocurrido con la repisa antes, "la repisa es de madera" pensé, pero no tiene sentido, Esa repisa no vino con la casa, "Fue un accidente, no tiene nada que ver con la casa" me dije a mi misma.

Tu LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora