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Loki (from Marvel)

"What's that I hear, you wanna go for a ride?, oh, don't be afraid boy to come inside. I got the thing that you want, the fix that you need, chase this with a little lust and greed"- Nightlife, Green Day.

Asgard volvía a ser un auténtico caos, la noticia de que Loki había conseguido escapar de los calabozos había corrido como la pólvora y los habitantes del reino estaban temerosos de que volviese a realizar un plan malévolo, solo para demostrar que él es el verdadero Rey.

Ahora tenía otros planes en mente: deshacerse de Los Vengadores. A él no le importaba a quién dañar, todo aquel que se interpusiese en su camino, también saldría perjudicado. Loki no había conseguido encontrar el Teseracto, pero él solo necesitaba algo muy pequeño y a la vez valioso para conseguir emular el poder del cubo cósmico. Él estaba seguro que existía y solo tenía que volver a la ciudad que devastó meses atrás: Nueva York.

Poco a poco los civiles volvieron a la normalidad y parece que los incalculables destrozos de la batalla también se han ido reduciendo. Él no podía ser visto, por lo que se hizo pasar por un ciudadano más gracias a sus poderes, quienes le permitían convertirse en el clon de cualquiera. Cuando pasaba justo delante de la torre Stark, su expresión se vuelve asqueada y pensó que no tardaría mucho tiempo en vengarse de quienes eran, según él, unos monos de feria. En ese momento, deshacerse de los superhéroes no entraba en sus planes. Con paso firme cruza la calle y corre hacia un taxi libre que acababa de dejar a un pasajero.

"Buenos días, ¿puede llevarme a Brooklyn?" pregunta Loki, con el tono más amable que puede realizar.

"Por supuesto que sí señor, ¡suba!" el asgardiano asiente y se sube en la parte de atrás del vehículo. El taxista de aspecto extranjero arranca enseguida, dejando la torre Stark detrás. Loki le echa un último vistazo y vuelve a dirigir su mirada al frente, resoplando.

"Esos de ahí arriba son la hostia, nos salvaron de una buena hace semanas. Si no fuese por ellos, no quiero saber cómo estaríamos con esa manada de monstruos a las órdenes del tipo ese con cuernos. Lo llaman el papá de Bambi, bautizado por Tony Stark" narra riéndose con el comentario final, sin quitar la vista de enfrente. Loki vuelve a suspirar y se remueve en el asiento terriblemente molesto por lo que ha escuchado.

"Son unos raritos, ¿no se da cuenta?–comenta buscando la vista sorprendida del taxista a través del espejo retrovisor- han dejado la ciudad hecha un desastre y ha muerto mucha gente, sí, son realmente buenos" suelta con ironía.

"No lo dirá en serio, ¿verdad?, ellos hicieron lo que pudieron. Si no hubiesen intervenido, podría haber muerto mucha más gente y ahora mismo estaríamos gobernados por ellos"

El ambiente empezaba a ponerse tenso y la maldad empezaba a envolver de nuevo a Loki y ese no era el momento. Cogió aire durante 3 segundos y suspiró, seguidamente abre la ventana para ventilar el interior. No quería seguir esa conversación para evitar que alguien más muera, no ahora, no de momento. Por suerte el conductor no siguió la conversación y se centró exclusivamente en el tráfico. Había pasado un rato y ya se empezaba a divisar el famoso puente de Brooklyn. "Ya estamos llegando, señor", informa el taxista, con tono seco. Loki se limita a asentir y dirigir su mirada de nuevo hacia el paisaje.

"¿Quiere que lo deje en un lugar específico?" pregunta el taxista. Loki redirige su mirada intimidante lentamente hacia el espejo retrovisor. "Lléveme a la calle Downrood Alley" responde fríamente, mirándole a los ojos. Cuando llegan, Loki le paga y sale del coche, deseándole un "que tenga un buen día" con tono malévolo, algo que provocó que el taxista acelerara deprisa y saliera despedido, desapareciendo en la esquina.