Narra Agus:
Me levante cuando sono mi alarma, me prepare pare para ir a la escuela, desayune y salí. Ya hacían más de 6 meses desde que empezaron las clases, me hice mucho más amigo de Joel, mejores amigos diría yo, y seguía sentándome con Gabriel y cada día era más insoportable. Habíamos tenido más partidos y debido a mi buen rendimiento lo habían remplazado completamente del equipo, ya no tenía como molestarme con el voley así que solo se dedicaba a encontrar cada mínimo error que cometiera y restregarmelo en la cara.
Llege a la escuela y me senté en el lugar del fondo que compartía con Gabriel, este llego y sorprendentemente solo dejó su mochila y salió otra vez, me sorprendió que no me molestara con alguna cosa boba, volvió a entrar al rato junto con la seño y se sentó en su lugar.
La mañana paso sorprendentemente tranquila, comenzaba a preocuparme que no me moleste con nada, llego la hora de la salida y eso día había decidido ir caminando por lo que al salir de la escuela simplemente comencé a caminar hacia mi casa, o bueno ese era mi plan hasta que...
-Vos y yo tenemos que hablar- escuche y sentí como me tiraban de la mochila haciéndome caer.
-Que queres?- dije a la persona mientras me levantaba.
-Ven- hablo tirándome de la muñeca hasta un lugar donde no era muy visible.
-Que queres?- volví a repetir con algo de molestia mientras me zafaba de su agarre.
-Quiero que dejes de ser tan pegajoso con Joel- dijo mirándome serio a los ojos.
-Y eso a vos que?- pregunte confundido.
-El me dijo que le molesta que seas tan pegajoso, deja de ser así con el- hablo serio tomandome del cuello de la remera y pegándome a la pared.
-Eso es mentira, el ni te habla- reproche empujándolo, escuche como chasqueo la lengua y sonrei. -No me digas que te gusta Joel?- rei mirándolo.
Note como se ponía rojo y rápidamente se tiro sobre mi para golpearme, intenté defenderme pero el era más grande y más fuerte que yo...
Llegue a casa y para mi mala suerte estaban mi hermano y Joel sentados en el sofá, cuando entré intenté hacerlo en silencio para que no se percataran de mi presencia. Pero cuando estaba apunto de llegar a mi habitación sin ser visto, escuche como mi hermana que venía por el pasillo me saludaba, haciendo que los otros dos también se den cuenta de que estaba ahí, aun no me daba vuelta por lo que no podían ver mi cara.
-Agus, tenes que saludar cuando llegas y más si hay gente- me reto mi hermano, no quería darme la vuelta así que me quedé parado con la mirada de los tres mayores en mi.
-P-perdon... Hola- la voz me salio algo cortada, estaba algo nervioso y además me dolía el cuerpo.
-Estas bien? Te escuchas raro- pregunto Joel, se escuchaba preocupado.
-Si- trate de sonar lo más convincente.
-Sigues sonando raro... Date vuelta- hablo esta vez mi hermana.
Lentamente y con algo de vergüenza me di vuelta mostrando mi cara tenia algunos moretones y cortes, también el labio cortado.
-QUE TE PASO?!- gritaron los dos chicos al mismo tiempo.
-Veni que te desinfecto- dijo mi hermana mientras me agarraba de la mano con cuidado y me llevaba al baño, Lázaro y Joel venían detrás de nosotros.
-Que paso?- pregunto mi hermana con tranquilidad mientras me curaba con cuidado.
-Un chico se enojo porque... choque con el- invente rápidamente.
-Voy a hablar con la escuela, esto no puede ser- hablo mi hermano.
-No no, no me paso en la escuela ya estaba lejos- dije rápidamente, observe a Joel que estaba con la mirada perdida.
Lázaro soltó un suspiro, mi hermana me termino de curar y salimos del baño. Mis hermanos fueron a la sala y yo fui a mi habitación, Joel me siguió y nos sentamos juntos en la cama.
-Estas bien?- pregunté después de unos segundos en que estuvo en completo silencio.
-Si, tu?- respondió, la voz le salió algo preocupada.
Note su preocupación y me acerque a él poniendo mi mano en su espalda.
-Estas preocupado por lo que me paso, no?- pregunte con calma.
-Si, un poco- respondio bajito y apoyo su cabeza en mi hombro.
-Tranquilo, estoy bien... Solo fueron algunos golpes- respondí apoyando mi mano en su cabeza.
-Lo se, solo me preocupe... podrías contarme que paso en realidad? No me creo eso de que se enojo porque chocaste con el- habló levantándose para verme a la cara.
-Prometes que no harás nada?- pregunté luego de unos segundos mirándolo a la cara.
-Lo prometo- respondí dudoso.
-Bueno... fue Gabriel, estaba enojado por eso de que lo cambiaron por mi en el quipo- hable son querer decirle lo que paso en realidad.
-... No puedes dejar que te pegué, y menos por eso- habló luego de unos segundos de silencio. Antes de que pueda hablar este siguió - No voy a hacer nada porque te lo prometí, pero no esta bien- dijo
-Gracias- dije y volví a hablar -Se que no esta bien, pero tampoco quiero más problemas- suspire.
-Lo bueno es que ya no queda mucho para que se terminen las clases y te cambies de escuela- dijo sonriendo.
-Vengan a merendar!- Grito mi hermano desde la cocina interrumpiendo nuestra charla.
-Vamos- dijo Joel mientras se paraba y yo lo seguía caminando hasta la cocina, llegamos y nos sentamos en la mesa donde ya estaba la merienda.
-Gracias- dijimos al mismo tiempo hacia mi hermano.
Luego de merendar íbamos salir a jugar, pero mi hermano nos pidió que fuéramos a comprar algo. Aceptamos y salimos en camino a la tienda.
-Me gustaría que pudiéramos ir juntos a la escuela- dije mientras pateaba una piedra en el suelo.
-Si, tenes razón- me respondió y sonrió, por alguna razón aquella sonrisa hizo que se me calienten las mejillas. Desvíe la mirada otra vez a la piedra, sin saber porque había sentido eso.
