Solo tu y yo. (Aquino x Sylvee)

Primeros Días

Un nuevo reto comenzó
Pov Sylvee:

Después de la enigmática charla con el unicornio, me quedó claro que aquel encuentro marcaría el inicio de una vida llena de desafíos. Aún aturdida por las palabras de aquel ser mágico, traté de acercarme a los demás jugadores, anhelando encontrar con quién compartir esta aventura y formar un equipo. Sin embargo, la barrera del idioma era una muralla que no lograba derribar, mis palabras se enredaban entre sí, a veces acierta, otras se perdían en la incomprensión y al final parecía que nadie podía entender lo que quería decir. Pensé en Sapnap, en lo natural se le daba bien hablar español, inclusive mejor que yo, eso le ayudo y había sido más rápido que yo al buscar un equipo. Mientras yo me quedaba atrás, intentando recomponer las piezas de una estrategia que se desmoronaba antes de empezar. Con resignación, fui a buscar los materiales básicos para sobrevivir, el tiempo se volvía oro, cada minuto contaba. Pero mientras daba cada paso, la soledad pesaba más de lo que imaginé.

Mientras descendía por una colina y rastreaba los objetos esenciales, un chico apareció en mi camino, fue un destello de esperanza en medio de mi tan ajetreado mundo . Al verme, corrió hacia mí, su entusiasmo era significativo que parecía que ya nos conocíamos. Al menos hablaba inglés, lo cual me permitió mantener mi primera conversación en este mundo extraño. Habló de lo que se avecinaba, advirtiéndome que la muerte no sería el final si lograba superar ciertas pruebas impuestas por un ser llamado REVIL, quien con su ruleta controlaba el destino de todos en este lugar.

Al terminar la charla, la inquietud se instaló en mí, bajé a una cueva, buscando el hierro que necesitaba para formar mi armadura. Cada sonido en la oscuridad me hacía estremecer, y mientras recogía pieza por pieza de la armadura, el peso de la soledad volvía a caer sobre mí. Quería salir, encontrar aliados,formar un equipo pero antes necesitaba asegurarme de estar lista para lo que fuera que viniera.

De repente, vi a otro jugador en la entrada de la cueva,mi corazón dio un vuelco, decidí hablarle, aunque no sabía si entendería. "Hi..." murmuré, cautelosa, escuché un suave "hola" como respuesta, su voz en otro idioma me trajo un sentimiento de duda. Pero, antes de que pudiera reaccionar, el chico pasó de largo, avanzando como si el tiempo también jugara en su contra. Desesperada, lo seguí y en un arrebate de mis sentimientos lancé una súplica casi sin aliento__ "¡Equipo! ¡Equipo! ¡Equipo!" __

Él se detuvo y me miró, algo sorprendido y yo, reuniendo todo el deseo de no estar sola, le devolví la mirada con una expresión de tristeza, esperando que eso le hiciera comprender. __"Amm, no problem but... my inglish so bad!" __dijo en un tono nervioso. Sabía que las palabras serían una barrera en en futuro equipo, pero también sabía que la soledad era mucho peor.

__No importa__ dije, casi susurrando y con una sonrisa esperanzada__puedo aprender... español___

Él intentó explicarme cómo funcionaba su equipo, el "Team Orfanato". Sus palabras eran un torrente, apenas lograba entender un par de cosas. Sin embargo, capté lo más importante, recibían a todo tipo de miembros, sin excepción.

Con cada palabra que yo no comprendía, él parecía esforzarse aún más por hacerse entender, ese esfuerzo, tan genuino, me resultaba increíblemente tierno. Cada gesto, cada pausa para asegurarse de que le seguía, mostraban una amabilidad que me llenaba de una calidez, inesperadamente sentí un extraño consuelo en su presencia como un abrazo lleno de amor.

Después de un rato, me miró con una expresión de curiosidad. __"Qué tonto de mi parte, no nos hemos presentado. ¿Cuál es tu nombre?" __dijo con una sonrisa suave. Aunque no entendí todo lo que dijo, reconocí en sus ojos la pregunta.

Le respondí casi sin pensarlo, como si el viento llevara mis palabras hacia él. __"Me llamo Sylveey... ¿y tú?"__ pregunté, mi voz apenas era un susurro y casi comprensible. __"Aquino,"__ respondió, y cuando dijo su nombre, algo en su tono y en la manera de decírmelo me hicieron sentir que este momento quedaría grabado en mi memoria.