Almas unidas por la luna

capitulo 1 (Nos encontramos)

Era un día hermoso con una suave brisa fría que arrullaba sus cuerpos. Hay estaba Marco, un Omega de clase media, o eso él quería ver, piel color canela, suave y versa como la porcelana, ojos color café como la cafeína, cabello café oscuro que se veía suave al toque que presumía su buen cuidado en este y unos labios color rosa claro que te tentaban a besarles. Llevaba un suéter color rojo y unos jeans que tapaban su delgada figura ante los ojos. Junto a él estaba su mejor amiga Star, una Omega dominante, la cual tenía unos ojos color azul como los diamantes, cabello color amarillo rabiate pero con un toque pálido, piel pálida pero cálida con unas marcas en forma de corazón que yacían en sus mejillas, de vestimenta, portaba un hermoso vestido color azul marino tocando un celeste y un pequeño pulpo color rosa en el pecho y unas medias color zarzamora y rosa pastel.

Ellos platicaban amen-amente, soltando pequeños chistes mientras caminaban a casa sin prestarle mucha atención a los demás, solo viendo y sintiendo el hermoso clima con aquella brisa suave pero acogedora que se sentía, hasta que de repente en medio de su caminata se vieron unas llamas radiantes en forma de círculo, el cual al desvanecerse se asomo un hermoso carruaje color negro y rojo tirado de unos singulares caballos esqueletos con llamas, lo cual hizo que Marco y Star se sorprendieron por tan repentina aparición, aunque Star ya sabía quién era la persona dentro.

Marco se encontraba alerta por si la inesperada visita fuera un enemigo, hasta que la persona o ser dentro de él salió, el cual era un alfa dominante. Pudo detectarlo por las fer-monas que emitía con un aroma suave a vino que llamó la atención del Omega. Mientras salía, el joven pudo notar que tenía un hermoso traje color negro junto a una corbata de igual color, portando debajo una playera blanca. Pero lo que llamaba más la atención era su hermoso color de piel, morado claro, rosando un rosa, cabello color salmón, tres ojos color rojo como los rubís y unos cuernos que sobresalían de su cabeza, el cual deslumbraba una elegancia que ataría cualquier mirada con la vestimenta y fortaleza que emanaba.

Marco, al ver al alfa, quedó asombrado; se veía tan bien que no pudo apartar la mirada por unos segundos, pero no caería ante la apariencia de aquel joven príncipe alfa. Al notar que estiraba su mano hacia Star, reaccionó tan rápido y solo pudo cortar la mano de aquel alfa viendo cómo él juntó de nuevo su mano, lo que lo aterrorizó.

Marco: Star, ¿quién es él?

preguntó serio el Omega sin bajar la guardia 

star: Él es mi ex novio, Tom.

Contestó fastidiada por la presencia del alfa.

Marco solo pudo ver con desconfianza al alfa al que se veía en su límite de paciencia, trató de calmarse acariciando un pequeño conejo rosa, lo que funcionó y pudo hablar más calmado.

Tom: Hola....mmm

Dijo el alfa peli salmón sin saber cómo dirigirse a aquel Omega, por lo que lo miró esperando una respuesta de aquel chico que se le hizo un poco lindo...

Marco: Me llamo marco... hola 

Respondió aun desconfiado pero amable 

Tom: Bueno, ahora apártate del camino; quiero hablar con Star, no contigo, mortal. 

Lo decía con un tono arrogante y frío, viendo directamente al Omega que se interponía en su camino hacia Star detrás de él.

star: ¿Qué quiere Tom?

Contestó la Omega, molesta por la forma en que trató a su mejor amigo.

Tom: Vine a invitarte al baile de la luna roja, Star.

star: No, gracias, Tom, ¿aún recuerdas por qué terminamos?

El alfa se notaba desanimado por tan fuerte rechazo, pero lo escondió bien. Sabia que fue su culpa, pero ya había cambiado, así que insistió una vez más para poder persuadirla. 

Tom: Lo sé, Star, pero he cambiado. Dame una oportunidad más; ya no soy el que era antes. Sí, por favor, star solo esta vez, deja demostrarte que cambie.

Star al escuchar la sinceridad en sus palabras y que las decía de corazón, así que solo pudo suspirar en derrota...

star: Está bien, Tom, aceptaré ir contigo al baile de la luna roja...

Tom, al escuchar esas palabras, no pudo estar más que feliz de que ella aceptara ir al baile con él, lo que expresó con una gran sonrisa, provocando que liberara un poco de sus fer-monas, las cuales llegaron a la nariz de Marco.

Marco: Controla tus fer-monas, ¿qué no ves que hay dos omegas aquí...?

Mencionó Marco tapándose la nariz, aunque le gustaba el olor a vino que desprendían las fer-monas del alfa.

Tom: como se que molesto..

Habló fastidiado al ver cómo el Omega se tapaba la nariz como si no le gustaran sus fer-monas, lo cual lo molestó sin saber por qué, haciendo que no quisiera controlarlas y se subió al carruaje ignorando lo dicho.

Tom: Adiós, Star, te veo a las 7pm. 

Mencionó con felicidad y dulzura en sus palabras, mirando de reojo al pequeño Omega, aun cubriéndose la nariz, haciendo que se fastidiara y solo se fuera después de decir lo que tenía que decir.

star: Hasta luego, Tom, estaré sin falta; no te preocupes.

Respondí con un tono cálido y repetido a la vez, sin tomarle mucha importancia a su rápida partida.

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Continuará entre el miércoles o jueves.

Disculpen las faltas de octografía; esta es una de las primeras historias escritas por aqui.