studying with the nerd

270 52 2
                                    

Description━ ❝ Rosé no se arrepentía en absoluto de sobornar al profesor para estudiar con la nerd❞

Autor/a original━ lvvsschae (de nuevo te agradezco por dejarme adaptarla <33).

Warnings━ Contenido sexual, leer bajó responsabilidad propia.

Roles━ versátiles.

Roles━ versátiles

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Oh, no.

Esto no podía estar pasando. A ella, mucho menos. Suspiró y sostuvo su rostro con sus manos.

El profesor Kang les había encargado a sus alumnos hacer un trabajo en dúo, él siendo quien elegiría a las parejas. Bien, habían varias personas que no le caían bien en este mundo...

Y una de ellas era Roseanne Park.

Arrogante, molesta, altanera y muy poco estudiosa, era una de las estudiantes más populares y a su vez deseadas de toda la preparatoria Hanyang. Y para su desgracia, ella, Jennie Kim, "la comelibros" había tenido el infortunio de formar grupo con ella.

— Hey! No quiero hacer grupo con una rarita de mierda, Kang. — Se quejó su compañera.

Salió de sus pensamientos cuando oyó aquellas palabras provenientes de la repugnante rubia.

— Park, no voy a permitir estos tratos a tu compañera. Tienes un punto menos de mi parte en tu calificación para mi materia, así que lo mejor va a ser que estudies y que te esfuerces en tu parte del trabajo. Se entrega en dos días, muchachos. — Finalizó el maestro, alzando una ceja.

— ¡Mierda!

Todos los presentes en el salón comenzaron a reír a carcajadas. Rosé apoyó sus pies en el banco y, entre risas, miró de reojo a la castaña que anotaba todo en su cuaderno y levantaba sus gafas que se mantenían en el puente de su nariz.

Sintió asco. ¿Por qué se le hacía tan repugnante aquella chica? No lo sabía.

La hora y media restante de clase había pasado volando, y al final de la clase, todos los alumnos se encontraban organizando entre ellos para ir a la casa del otro, y Rosé, con algo de pena oculta, fingió desinterés y fue hacia el banco de la castaña.

— Oye.

La menor levantó la vista con timidez. Era aquel apodo el que la neozelandesa le había puesto hace años, y ya sabía que se refería a ella cada vez que oía el mismo.

— ¿Qué?

— En mi casa hoy, después de clases. No quiero perder el tiempo, ¿Sí? Sólo quiero acabar con esta mierda. — La mayor comenzó alejarse apenas terminó la oración, caminando a paso rápido.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: a day ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

One Shots | ChaennieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora