CAP. 1 EL MONTE NATAGUMO

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Ella se encontraba corriendo en la sima del Monte Natagumo, el lugar era oscuro y le impedía un poco la visión, sobre todo porque llevaba puesta una máscara con cara de demonio, pero estaba acostumbrada a ella. 

En un momento encontró varios cazadores colgados de unos árboles, estos estaban muertos por lo que ella, en símbolo de respeto se quitó la máscara y clavó la katana en el piso. Se posicionó de rodillas y empezó a pedir paz por aquellas almas que se fueron, de cazadores y demonios pues, aunque hayan hecho cosas malas en algún momento fueron humanos.

Al terminar se levantó, tomó su katana y volvió a ponerse la máscara, volteando a ver a alguien que la miraba desde atrás.

-Se acercó por su espalda mirándola con su típica expresión neutra- ¿Terminaste, Usagi? -Se trataba de su maestro, Tomioka-

-No me juzgues, -Volteó a mirarlo- todos los demonios... -La interrumpió-

-Fueron humanos alguna vez, -Pronunció con seriedad- eso no...

-¿Debe hacer que les tenga piedad? -Hizo una reverencia- Lo sé, Tomioka-sama, pero es que pensar eso... -

-No importa, -Volteo mirando a un lugar- un demonio se encuentra por allá.

La enmascarada enfundó su katana y miró en el mismo lugar que Tomioka, también sentía esa presencia tan imponente y fuerte.

-Una luna menguante. -Pronunció segura-

-Exacto. Yo me encargaré ve con Kocho, -La miró de reojo- ayúdala.

[...]

Usagi se encontraba persiguiendo a un chico con un haori a cuadros, llevaba a un demonio en brazos, pero alguien se le adelantó pisoteando al chico haciendo que suelte a lo suelte, se trataba de Kanao. Elevó su katana intentando decapitarlo, pero el chico lo evitó jalándola de su capa blanca cayendo sentada sobre él. 

El demonio comenzó a correr y Kanao le dio una patada en la cabeza al chico, en ese momento intervino Usagi saltando de un árbol quedando frente a ella.

-Volteó a verla- Ocúpate del chico, -Miró en la dirección a donde había corrido- yo me encargaré del demonio.

Kanao tan solo asintió mirándola y Usagi comenzó a correr detrás de la demonio, al momento de tratar de decapitarla el demonio se encogió, teniendo ahora el aspecto de una niña pequeña, pero eso no la distrajo y continuó atacándola. Alcanzó a tomarla de su haori estampándola contra un árbol cercano, elevó su katana a punto de decapitarla, pero...

-¡MENSAJE, MENSAJE! -Pronunció un cuervo volando por encima de ella- ¡DEBEN LLEVAR A TANJIRO Y A NEZUKO A JUICIO! ¡TANJIRO LLEVA PUESTO UN HAORI A CUADROS Y TIENE UNA CICATRIS EN LA FRENTE, NEZUKO ES UNA CHICA DEMONIO QUE MUERDE UN BAMBÚ! 

La chica miró desentendida al cuervo, pero miró a Nezuko y clavó su katana en el piso enojada por no poder matarla, se volteó encontrándose con unos kakushis que la miraban asustados. Tomó su katana, la enfundó y caminó en medio de ambos, tenía una expresión enojada, pero antes de irse les habló.

-Ella es la demonio Nezuko, -Continuó caminando- se la encargo, llévensela. -Pronunció con un dejo de molestia en su voz- 

No podía creerlo, con lo que le había costado poder atraparla y resulta que no debían matarla, eso la frustró y enojó demasiado. Usagi realmente odiaba a los demonios, no poder matarlos era su mayor odio y a la vez preocupación, por aquellos que podían ser devorados por ellos.

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⏰ Última actualización: 3 days ago ⏰

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LA HASHIRA SIN NOMBREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora