La Vida del Asesino de Hechiceros en otro mundo.

Toji en Naruto (II)

Se había vuelto aun mas molesto, el contrincante de Gaara de la Arena no aparecía, he tenido que ver los diversos combates de los niños, desde el mocoso con ojos ciegos y el que es corrompido por una energía como energía maldita, luego el de un mocoso de moscas contra un títere, por ultimo un mocoso de piña contra una mocosa con un abanico. Todo mientras se sigue esperando a que aparezca a Uchiha Sasuke... al parecer es un favorito, las reglas se doblaban a favor... Tal vez si lo mata...

Nah, quien realiza un trabajo gratis...

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Cuando al fin apareció, hizo una entrada dramática con un peliblanco, dios que molesto, cuando al fin iba a empezar el combate, decidí que no iba a soportar mas tiempo, sumado al comportamiento de la gente de la aldea ninja de la arena, no quería quedarse a ver que planeaban, el solo va a realizar su trabajo, así que, se paro y directamente se acerco al borde, tapando a otro mono.

-OYE QUÍTATE- grito el mono gordo con ropa elegante, pero a Toji no le importo, simplemente miro como los ninjas lo miraban y apenas les importaba, porque, que podría hacer un mono como el en la "gran aldea de konoha".

Así que aprovechándose de eso, se paro directamente en la varilla que separaba los monos de los ninjas, y miro en dirección de su presa Gaara de la arena, el cual percibió algo y volteo a verlo con una inmensa intensión asesina, pero burda sin control, igual que un bebe que puede asesinar a un insecto.

Ante esa intención asesina, unos ninjas ya se preparaban para detenerlo a el, pero no le importo, mientras sacaba a su querido perro de su estomago y este crecía y se enrollaba alrededor de su cuerpo.

Miro hacia donde el mas grande "ninja" estaba, el Hokage de Konoha junto la sombra de la arena, para luego una sonrisa depredadora creciera y sacando la alabarda invertida de su querido perro. Se impulso a extremadamente velocidad mientras todo el concreto de donde estaba apoyado se destruí junto con la varilla de metal, y a una velocidad de Mach 1.5 llegaba al frente del niño de arena, el cual sorprendido por su velocidad trata de manipular su arena para atacarlo, pero el simplemente corta a través de ella sin demora alguna, encontrando luego una barrera automática que se movió a mas velocidad, pero no importa, la alabarda invertida la a traveseo, y continua su recorrido hacia el ojo de Gaara y su cerebro

Para Gaara lo ultimo que vio en su vida fue la punta del arma en sus ojos con la inmensa figura de la persona, que lo miraba con burla y sus oídos escuchando "Un mono acaba de asesinar su querida arma de guerra". Para luego caer en el abrazo de la muerte para siempre

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Fue una sabia elección evitarse los problemas al asesinar el mocoso antes de que empezara el combate, al momento de asesinar al niño que tiene un arma de guerra sellada dentro de el, noto como alguien hizo algo para poner a dormir a los monos, pero como el no tiene nada de chakra o energía maldita, no le afecto, aprovechando el caos, se preparo para salir de ese lugar rapidamente, pero el mocoso favorecido trato detenerlo, usando una técnica eléctrica de gran velocidad, pero el no tenia ese tiempo, se atrevía asesinar a una persona de otra aldea en Konoha, pero eso no significa que se quedara a que lo ataquen y aguantar todo. Por eso moviéndose a una velocidad superior, tomo su cabeza y lo estrello contra el suelo enterrándolo la mitad de su cuerpo.

Así, aprovecho para correr contra el muro que había, mientras veía al organizador de las peleas acercarse a el, pero a el no le importa, aun con la alabarda invertida en su mano, unida a la cadena de las mil millas, empezó a sacudirla a gran velocidad alrededor del campo de batalla, mandando a volar al ninja contra el muro opuesto, fracturando el concreto.

Ya sin ningún problema, mientras veía a los ninjas de la arena pelear contra los ninjas de la hoja, se dispuso a marcharse, pero encontró a un títere atacándolo desde el aire, teniendo que tomarse un momento para destrozarlo. Volteando a ver a uno de los mocosos que perdió contra el de los insectos, atacándolo mientras lo miraba con ira, mientras mas atrás la mocosa del abanico lloraba al lado del cuerpo del niño que asesino.

para el, solo era una molestia, ¿que le importaba a el que su hermano fuera una arma de guerra y que otras personas lo deseaban muerta?, que problemático manejar dos mocosos emocionales... debatiendo si valía la pena matarlos o huir...

mirando toda la arena, encontró que había un ninja peliblanco de konoha que lo miraba fijamente mientras peleaba contra dos ninjas de la arena... No, ya se demoro demasiado tiempo.

Aprovechando que el mocoso del títere estaba gritándole palabras mientras su marioneta cargaba contra el, aprovecho para moverse hasta el borde de la arena, para luego dar un salto, llegando mas allá de 40 metros de alto, para luego, por los cambios de presión, al mover sus piernas, empezar a planear en dirección contraria al bullicio que se hacia en la aldea de la hoja.

Volteando una ultima vez a ver el campo de batalla, vio se creaba una barrera donde atrapaban al "gran hokage" y al kazekage por 4 personas ajenas a la arena, pero, el ya completo su lucrativo trabajo, lo que pase ahora no es de su importancia.

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Luego una sustentante misión, se fue a apostar a un famoso casino en el país del fuego, el camino fue algo largo, demorándose poco mas de 2 semanas para lograr llegar desde la casa de cambio que estaba en el país de la hierba hasta el famoso casino, pero valió la pena, porque apenas entro al casino, se encontro con alguien AUN peor que el apostando, usando las decenas de millones que gano, pudo jugar con la famosa "oveja gorda" que había escuchado antes.

Y realmente era gorda, pero lo que mas le gustaba, era que incluso con su pésimo talento para apostar, si lo hacia contra ella, no tenia ningún problema recuperar todo lo que perdía en otro juegos o mesas.

Por eso, decidió aprovecharse hasta ultimo centavo, persiguiéndola a cada mesa que iba a apostar, apostando a todo lo contrario que ella pusiera, aumentando todo su dinero en casi un 30% en una sola noche.

Obviamente tal acción disgusto a la mujer con senos gordos, pero no le importaba, luego de una gran misión, era hora de la recompensa.