En Altamar

Prólogo

3 de mayo de 1939
San Francisco / Estados Unidos

Nathalie Roberts

Termino de asegurar los broches de mi maleta y vuelvo frente a espejo acomodando la corbata de mi uniforme. Me coloco mi gorra con el escudo de la FOM y vuelvo a checar mi reflejo checando que esté perfecto.

Por los altavoces se escucha el llamado de mi capitán que nos informa que estamos a punto de llegar al puerto “Battleship Cove” , es el principal de la marina aquí en Estados Unidos, cuenta con grandes almacenes y muelles equipados con los mejores servicios para descargar cargamentos. Cuenta con una estupenda posición ya que la base queda bastante cerca lo que nos facilita a los miembros de la tripulación llegar más rápido.

  Camino por los pasillos junto a varios compañeros hacia la cubierta. Todos con sus uniformes pulcramente arreglados, los rostros felicidades y emocionados al igual que las voces llenas de emoción que comentan sus planes para cuando toquen tierras y vuelvan a ver a sus familiares y amigos. El sonido de los zapatos resuena por cada escalón, todos llevamos nuestras maletas en las manos, formamos filas sobre la extensa cubierta. Me apresuro a tomar mi lugar al lado del capitán Erik Wagner , de la chaqueta de su uniforme cuelgan todas sus medallas, en su hombro izquierdo se ubica una media luna junto con una estrella doradas. Esa es la insignia de los capitanes, mientras de los tenientes como yo solo llevamos la media luna.

—¡Marineros firmes! — Bocifera el capitán, todos acatan la orden. Talones unidos, puntas separadas, manos al lado del cuerpo, mentón en alto y espalda erguida —¡Como muestra de haber logrado concluir otra misión exitosa honremos nuestros nombres entonando las notas de nuestro himno! — las manos de todos se alzan y no tarda en escucharse las letras de la marcha

On the waves of destiny, we sail with honor bright, 
Defending our coasts bravely, with courage and might. 
With the wind in our sails and the sea as our home, 
The Maritime Operations Force is always ready to roam.

Maritime Force, united in mission strong! 
Under the banner of our nation we belong. 
With loyalty and valor, we stand in action true, 
We guard the peace, we are their shield anew!

In storms and in calm, we shall not retreat, 
With skill and with wisdom, every challenge we'll meet. 
In service to the people, through every wave and sway, 
Our strength is the ocean; we will never sway!

Maritime Force, united in mission strong! 
Under the banner of our nation we belong. 
With loyalty and valor, we stand in action true, 
We guard the peace, we are their shield anew!

From distant ports to horizons blue and wide, 
With bravery we face whatever comes with pride. 
For our homeland we fight with passionate devotion, 
The Maritime Operations Force is our heart's true motion.

Maritime Force, united in mission strong! 
Under the banner of our nation we belong. 
With loyalty and valor, we stand in action true, 
We guard the peace, we are their shields anew!

—¡Buen trabajo soldados!, nos vemos en nuestra próxima travesía.

Se rompen filas y todos se apresuran a bajar cuando la pasarela se despliega. Espero unos segundos a que el alboroto  cese para poder bajar sin torcerme un tobillo o recibir un empujón.

—Roberts— volteo a ver inmediatamente a ver a quien me llama. El cabello castaño oscuro cae ligeramente sobre su frente debajo de su gorra, los ojos cafes le brillan a causa del Sol de la mañana al igual que su piel ligeramente bronceada.

—Capitán— le saludo con una breve inclinación de cabeza a la vez que una breve sonrisa se dibuja en mis labios.

—¿Se dirige a la base? O irá primero a casa— el alboroto ya había mermado así que descendiamos del barco.

—Daré mi parte y entregaré mi informe primero, ya luego tendré tiempo para descansar. —siento como mi corazón late a toda prisa dentro de mi pecho. Hace varios años que me gusta bastante el capitán Erik y siempre había deseado ser parte de su tripulación y hace un año lo conseguí. Desde entonces siempre he hecho mi mejor esfuerzo para hacer todo perfecto y ser de su estima.

—Siendo ese el caso la acompaño, también iré primero a la base. —me guía asta un auto que lo espera y el conductor nos habre la puerta para que entremos.

   Un Ford V8 de color negro con un elegante diseño.El modelo tenía líneas suaves y aerodinámicas, con un perfil bajo que le da un aspecto moderno. La parrilla delantera era prominente, con una forma en forma de "V" y contornos cromados que le dan un toque atractivo. Los faros estan integrados en los guardabarros, lo que contribuyen a su diseño fluido. El interior es espacioso y cómodo, con asientos tapizados en cuero. El tablero presenta un diseño sencillo pero funcional, con instrumentos fáciles de leer.

 
  El camino es corto, de unos 15 minutos aproximadamente. No hablamos de nada fuera de nuestro trabajo y de lo abrumador que es pasar meses en el mar.

Nos dirigimos a la oficina del contralmirante Peters, nuestro superior en esta base. Cuando nos dejan pasar la sorpresa me invade al ver allí vicealmirante Jager, la mano derecha de mi papá. Lo conozco desde niña aparte de trabajar también eran grandes amigos así que era normal verle en cenas y fiestas familiares.

—Llegan justo a tiempo— nos dice el señor Peters —Teniente haga sus maletas, regresará a Inglaterra— en ese momento siento como si el suelo debajo de mi se convirtiera en arenas movedizas que lentamente me hundían en ellas.

  Miro al vicealmirante pálida sin entender de lo que hablaba.

—Es momento de regresar a casa Nathalie