One-Shots Obagiyuu (Omegaverse)

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Referencia a la película: Son Como Niños 2

Obanai había organizado una gran fiesta, música en vivo, DJ, comida, todo ya casi estaba listo, solo faltaban las bebidas

Pero no cualquier bebida

Si no jugos para sus hijos

Su hermoso esposo Giyuu le había dado permiso para hacer esa fiesta siempre y cuando no hubiera una sola gota alcohol, no podía comprar nada de alcohol, si se enteraba que compro eso lo echaría al patio a dormir, Kaburamaru no se dormirá con el si no con los niños

Su pequeña princesa Sahara lo acompaño al supermercado junto con Giyuu por las cosas que faltaban, Giyuu fue por la comida. Se encontraban en el área de los refrigeradores, echando cajas de jugo en el carrito y su hija a un lado abrazando su peluche

- Antes compraba 10 cajas de cerveza para mis fiestas y ahora compro 10 cajas de jugo -no podía creer que le hizo caso a su esposo...aunque ya no debería sorprenderlo, siempre lo castiga con dejarlo dormir en el patio y que su serpiente durmiera con los niños

- Hola Sahara -un hombre albino se acerco a ellos con empujando un carrito de compras-

- Hola bizcocho sabroso -comento feliz la nena-

Obanai se saco de onda por eso, ¿Como una niña de su edad podía decir esas cosas

Su pequeña miro a su padre con sus ojos tan inocentes

- La tía Kanae y la tía Tsutako lo llaman de esa forma, así que lo llamo bizcocho sabroso

- Con que si ¿Eh? -miro a su pequeña y le dedico una pequeña sonrisa, pero por dentro pensaba que ya no debería llevarla a la casa de ambas mujeres o que saliera con ellas-

- Debes ser el esposo de Giyuu, Soy Sanemi -se presentó el joven de cicatrices en su rostro-

- ¿Y de donde conoces a mi esposo bizcocho sabroso?

- Lo trabaje duro esta mañana junto con su hermana -respondió con calma-

Bien, ahora no dejaría que su marido se juntara con su hermana, menos para las clases de Yoga

- ¿Así? Pues yo también lo estuve trabajando esta mañana a fondo -hablo con "tranquilidad" y apretaba el puño-

- Ah...excelente

Pronto una mujer de cabello rosa y puntas verdes se acerco al azabache. Mitsuri Kanroji, compañera de trabajo en la boutique donde trabajaba Giyuu

- Ho-Hola je..que vergonzoso, mi esposo está ahí

Señaló hacia atrás donde se encontraba un hombre con lentes

- ¿Y eso que tiene de vergonzoso? -Obanai no entendía lo que la mujer le decía-

- Déjame darte una pista

La chica señaló un broche el cual estaba en su cabello

- ¿Sufriste algun daño cerebral? -El padre de familia no comprendía-

La chica solto una dulce risita

- Creo que ya es momento para decirlo, ¿No Iguro-San? -pregunto la chica de ojos verdes-

- ¿Decir que? -de un momento a otro el esposo de la señorita Kanroji estaba detrás de ella-

- Ah..p-pues...-miro a iguro con ojos de "ayúdame"-

- Lo siento..y-ya me perdí, y creo que es momento de marcharnos -comento el azabache de baja estatura-

La situación era confusa, incomoda y sofocante

- Si esta bien, los veo en la fiesta -hablo el albino con cicatrices mientras caminaba a otro pasillo con su carrito de compras-

- Si esta bien -hablo con un tono algo desanimado la peli rosa-

Tomo la mano del hombre casado y coloco un pequeño papel en ella. Se acercó a su oído y susurro

- Llevare goma de mazcar ...-se alejo de su oído y con eso se fue caminando-

- Oye no entien- -fue interrumpido por el marido de la chica-

- Si fiesta de los 80, espero que mi disfraz no te-

- ¡Cielo! -hablo con fuerza la peli rosa llamando a su esposo-

- ¡Ya voy! -fue caminando rápido para con ella-

El dúo se miro,no entendía nada de lo que acababa de pasar. Nuevamente miraron hacia adelante, un Omega de ojos azules y rostro serio con pasos firmes. Se puso delante de su marido

- ¿Qué dice la nota que Mitsuri te dio? -se cruzo de brazos-

- Aam..-abrió el papel- Jugo, pan, harina...

- Del otro lado -con voz firme le ordeno-

El alfa volteo la hoja

- Ah -comenzó a leer- Te veo en tu buzón a las 11, ¿Por qué querría verme en mi buzón a las 11? -miro a su esposo-

Giyuu le arrebato la hoja, lo hizo bola hasta hacerlo pequeño, se lo metió la boca y comenzó a caminar mientras masticaba el papel dejándolos atrás

Estaba molesto, podía oler su aroma amargo, pero no entendía el porque estaba así

- ¿Tu entendiste algo? -miro a su princesa-

- No, ni un poco

En efecto, su marido estaba celoso