Amores, enredos y bebés...

Capítulo uno: Rescate.

Lan Zhan no sabía que más hacer, confiaba plenamente en su esposo, pero el sufrimiento de su hermano lo ponía en una difícil situación.

Wei WuXian se había ido hace tres días a Muelle de Loto, para impedir que Jiang Cheng cometiera una estupidez; tres días desde que se anunció la boda del alfa líder de la secta Jiang con un omega sin rango o fortuna, algo que nadie se esperaba.

En lo más profundo de su corazón quería confiar en su cuñado, aun albergaba la esperanza de que Jiang Cheng no podría herir a XiChen sin una buena razón, ellos era el uno para el otro, lo supo desde el primer día en qué los vio juntos, pero todo había cambiado dos meses atrás, luego de una misión que involucraba a la secta Jiang y a la secta Rionge, una secta menor que necesitaba ayuda.

Ahora con su hermano prácticamente al borde de la muerte, Wei Ying era su única oportunidad de salvar a su hermano y a su sobrino no nacido...

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— ¡Ah! ¡Ahí estás! Finalmente puedo conocer al omega de mi hermano — fueron las palabras de Wei WuXian al llegar a Muelle de Loto — mi querido hermano, siempre tan... ¿Paciente? ¿Será que finalmente han encontrado la forma de domar tu carácter? Felicidades pequeño...

— Xu LiuHi — contesta un pequeño omega vestido de azul, que se encontraba junto a Jiang Cheng, sirviendo una taza de té — maestro Wei, es un placer recibirlo aquí, espero que venga a dar sus bendiciones por nuestra boda...

— Por supuesto que sí, pequeño LiuHi, mi hermano no se casa seguido, y estoy aquí para garantizar la felicidad de los enamorados — dicho esto Wei Ying se dispone a tomar la taza que Xu LiuHi había colocado frente al líder Jiang.

— Lo siento — dijo el omega mostrando consternación — esta taza es una infusión medicinal para el líder Jiang — le brindo una sonrisa gentil y añadió — sin embargo, ahora mismo le haré traer una taza de té, más acorde a un omega en su estado.

Xu LiuHi se dispone a salir, no sin antes revisar que Wanyin tenga la taza de té en sus manos.

Wei WuXian puede ser muchas cosas, pero no es tonto y le fue sumamente fácil descubrir que su hermano ha caído con el truco más viejo y sucio de todos, saber esto lo indigna sobre manera.

¿Cómo es posible que el gran Sandu Shengshou hubiera sido presa de una bebida que lo dejaría en el mundo de la inconciencia?

Saber que Lan Huan está sufriendo por la torpeza de su hermano y la codicia de ese omega sin vergüenza es lo último que esperaba encontrar a su llegada, aunque viendo la situación desde otra perspectiva, era mejor así, las cosas se solucionarían en poco tiempo y él tendría toda la vida para burlarse de Cheng-Cheng por su descuido.

Por lo que decide poner manos a la obra, lo primero será deshacerse de esa infusión medicinal e impedir que Xu LiuHi le dé más, aprovechando su estado, se acerca a su hermano con movimientos torpes y exagerados, solo para justificarse en caso de que el tal LiuHi regrese antes, de ese modo consiguió tirar la taza de las manos de Wanyin, derramando su contenido sobre su hermano, que no hizo ni un solo gesto; para cuando Xu LiuHi regreso con la bandeja de té, todo estaba como lo había dejado, sin sospechar que su charada estaba a punto de caer.

— Pequeño LiuHi, baobao me pide semillas de loto, ¿Podrías mandar por algunas? — Wei Ying se felicitaba internamente por tan buena actuación — Cheng-Cheng, llévame al salón ancestral, quiero ver al tío Jiang y a Madame Yu — WuXian casi suelta la carcajada al ver la expresión de su hermano — LiuHi — se detiene en seco al ver que el omega los estaba siguiendo — aún no puedes entrar a esa sala pero pronto todo estará solucionado y todas las personas tomarán el lugar que les corresponde — decía con una sonrisa que pretendía ser comprensiva, pero que en realidad ocultaba su diversión.