Capítulo 31

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Al día siguiente, Lin Yi empacó su equipaje con Huo Mianmian y luego se dirigiría a la villa privada en la montaña.

Lin Yi terminó de empacar su maleta y se puso ropa limpia.

Hoy llevaba una sudadera negra y pantalones casuales, lo que le hacía lucir muy cómodo y relajado.

En ese momento, Huo Mianmian todavía estaba en su pijama de Pikachu.

Lin Yi le preguntó: "Mianmian, ya nos vamos. ¿Qué ropa vas a ponerte?"

Después de mirar el atuendo de Lin Yi, Huo Mianmian rápidamente sacó su propia sudadera con capucha negra.

Estaba claro que después de usar el pijama de panda a juego con Lin Yi ayer, se había entusiasmado por vestirse de manera similar.

Huo Mianmian levantó su pequeña sudadera con capucha negra para que Lin Yi la viera, su carita llena de anticipación.

Lin Yi se rió entre dientes cuando lo vio. "¿Mianmian quiere usar esto? Claro".

Pronto, padre e hijo se cambiaron de ropa y llevaron sus maletas escaleras abajo.

Ambos eran increíblemente guapos, vestían sudaderas negras a juego, lo que los convertía en una vista encantadora mientras bajaban las escaleras juntos.

Sin embargo, la sudadera con capucha de Lin Yi tenía un diseño más simple, mientras que la de Huo Mianmian tenía un adorable patrón de cabeza de gato en el frente.

No solo la ropa de Huo Mianmian era linda, sino que él mismo también era adorable.

Sin pedirle ayuda a Lin Yi, llevó su pequeña maleta, bajando con cuidado las escaleras con sus cortas piernas y luciendo particularmente bien educado.

El mayordomo, preocupado de que pudieran tener sed o hambre en el camino, preparó una bolsa de bebidas y bocadillos y se la entregó a Lin Yi. "Sr. Lin, esto es para usted y el joven maestro en su viaje".

Lin Yi se sorprendió por la amabilidad del mayordomo y aceptó la bolsa con gratitud. "Gracias, tío Wu".

El mayordomo hizo un gesto con la mano. "Es mi deber".

Luego agregó: "Sr. Lin, el fin de semana se acerca. El Sr. Huo no necesitará ir a la empresa entonces. ¿Por qué no espera hasta el fin de semana y va con el Sr. Huo?"

La intención del mayordomo era clara: quería acercar a Lin Yi y Huo Jihan, dándoles más tiempo para desarrollar su relación.

Desgraciadamente, los esfuerzos del mayordomo estaban destinados a ser en vano.

Lin Yi simplemente quería llevar al pequeño a la villa para pasar unos días de relajación, no una salida familiar.

Entonces dijo: "El señor Huo está demasiado ocupado. Es mejor no molestarlo".

Con eso, llamó a Huo Mianmian: "Zai, ¡vámonos!"

Huo Mianmian rápidamente sacó su pequeña maleta y siguió a Lin Yi.

Al ver esto, el mayordomo suspiró pero no pudo hacer nada más.

Lin Yi llevó a Huo Mianmian al garaje.

Anoche le había quitado las llaves a Huo Jihan de un Porsche y hoy por fin pudo sacarlo a dar una vuelta.

Inesperadamente, cuando llegaron al garaje, se encontraron con Huo Jihan, que se dirigía a la empresa.

Huo Jihan, vestido con un traje negro perfectamente confeccionado, estaba de pie cerca hablando por teléfono. Su figura alta y erguida exudaba una presencia imponente.

El Padrastro De Repente Se Volvió PopularDonde viven las historias. Descúbrelo ahora