Esta es la historia de Son Goku, el Saiyajin más fuerte del universo 7. Un día, mientras entrenaba, su presencia fue requerida por Zeno-sama, quien deseaba hablarle sobre una importante propuesta.
Sin embargo, durante este encuentro, Goku descubrió...
Después de una sesión de fotos con Goku luciendo su nuevo traje, ambos pasaron alrededor de media hora conversando sobre temas triviales, como la nueva casa donde él viviría y otros detalles cotidianos.
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Mientras tanto, compartían unos tragos de whisky para pasar el rato.
Aunque la bebida comenzaba a embriagar a Harley rápidamente, Goku parecía inmune a sus efectos, aunque le provocaba algo de sueño.
El Saiyajin, sintiendo el cansancio, expresó su intención de irse a dormir, pero Harley, al notar esto, decidió tomar la iniciativa y comenzó a actuar.
Harley, con una sonrisa traviesa, invitó a Goku a su casa, aprovechando que él no tenía dónde dormir por el momento. Le ofreció una de las habitaciones, sabiendo que si goku supiera que era la suya, probablemente la rechazaría. Goku, con su habitual entusiasmo, aceptó sin sospechar nada. Mientras tanto, Pamela, con una expresión pensativa, se retiró rápidamente a su cuarto, aparentemente con algo urgente que atender.
Aprovechando la tranquilidad de la noche, Harley se deslizó silenciosamente en la habitación donde Goku dormía, envuelto en las sábanas. Con una mezcla de curiosidad y deseo, se acercó a la cama. Sus dedos rozaron suavemente las sábanas, sintiendo el calor del cuerpo de goku a través de ellas.
Una sonrisa se dibujó en sus labios mientras se inclinaba, deslizando un dedo bajo la manga de la camisa de Goku, explorando su pecho musculoso.
El corazón de Harley latía con fuerza al contacto con la piel cálida y firme de Goku. Deseosa de más, comenzó a deslizarse lentamente bajo las sábanas, acercándose cada vez más a él.
justo lo suficiente como para descubrir la verga del poderoso saiyajin. Sus ojos se posaron en él, fascinada por la fuerza y belleza de su erección dormida.
Su respiración se hizo más profunda y lenta, sus pensamientos sumergidos en el deseo que empezaba a crecer dentro de ella.
Con un movimiento cauteloso, Harley levantó los dedos hacia ese objeto erótico que descansaba entre las piernas de Goku. Sintió una mezcla de nerviosismo y excitación al acercar su mano a él.
