Nos despertamos la mañana siguiente muy temprano y llegó el momento de preparnos para ir a Gringotts. Yo no tenía que ponerme un disfraz , asi que me puse a observar a Hermione que practicaba miradas parecidas a la loca de mi tía. Ron terminó con el pelo castaño y sin pecas, era simplemente perfecto si yo no lo hubiera visto transformarse no lo habría reconocido jamás. Harry se cambio el pelo a rubio y sus ojos azules y Hermione puso un encanto en sus gafas para que parezcan invisibles. Por último, pero no menos importante Hermione utilizó una poción en las cacerolas para cambiar ella misma. Ella, como Harry fue rubia con ojos azules, así que podrían pasar por gemelos.
Vi como ella se volvió hacia mí y sonrió ruborizándose un poco.
"Bueno ... ¿cómo me veo?" Ella me lo preguntó
Me tomó bastante tiempo para responder, yo simplemente no tengo palabras para explicar lo hermosa que se veía. Al instante pensé en ella y mi futuro, si ambos sobrevivieramos tendría que proponerle ser mi novia.
"Te ves increíble" hice una pausa por un momento para tirar de mis pensamientos. "Ron será Marcus Flint, Harry será Adrian Puce y Hermione tú serás mi novia Astoria Greengrass" Hermione se sonrojó al escuchar esas palabras, todos asintieron con la cabeza en reconocimiento.
Me acerqué a la cama y tire mi mochila en mi regazo antes de llevar mi brazo a lo profundo de la bolsa y saqué 3 series de ropas y se las arrojé a ellos.
"Ponganselo, si quieren hacerse pasar por sangre pura van a tener que vestirse con un millón de galeones" terminé con una sonrisa.
Esperé pacientemente a que se cambiaran y antes de salir a la calle y comencé a deshacer los hechizos y desmontar la carpa. Tomé la bolsa de Hermione y la puse dentro de mi propia bolsa antes de colocar el encanto contracción en él y meterlo en los bolsillos. Nos agarramos las manos antes y en el acto fuimos absorbidos en la nada.
Una vez que abrí los ojos, miré a mi alrededor, estábamos en el Callejón Diagon. En dirección a Gringotts me detuve y se volví hacia ellos.
"No hablen, ni se presenten a menos que les haga un gesto. Si alguien les dice algo y es apropiado responder solo asientan con la cabeza."
Tomó 49 pasos llegar a la recepción en el interior de Gringotts desde donde estábamos. Con los tres parados detrás de mí como mis flancos Me aclaré la garganta para llamar la atención de goblins.
"Quiero entrar en la bóveda de Bellatrix Lestrange." dije con mi voz snob que he usado muy bien.
Los duendes parpadearon
"La identificación?" preguntó.
Metí la mano en mi túnica y me saque la varita del bolsillo, agarro mi varita y la puso delante de él. Vi como sus dedos largos y delgados la cogieron y la miraba como si la estuviera estudiando y luego dejó escapar un suspiro.
"Por aquí señor Malfoy." dijo mientras agarraba una llave y se dirigía hacia la entrada de las bóvedas subterráneas.
Yo estaba en el borde todo el tiempo, ¿cómo se supone que vamos a buscar este Horrocrux con un duende respirando en la nuca. Tal vez podríamos pedir un poco de privacidad o tal vez podemos utilizar la maldición imperio sobre él o algo así. Esos eran mis pensamientos constantes mientras nos acercábamos a la bóveda de mi tía.
Vi como el duende se adelantó con las hojalatas al dragón y luego más aún vi como él puso su mano en la caja fuerte haciendo que se abriera. Mis ojos se abrieron cuando vi lo que había dentro, no porque se trataba de una nueva visión para mis ojos, sino porque me di cuenta de que tendría que buscar a través de todo para encontrar el Horrocrux.