Aurora
Mis manos se apretaron en puños, ¿Había estado con una mujer hoy?¿Se la había follado?
"no tengo ningún problema. Simplemente no me toques," dije.
El me miró y avanzo hacia mí. Di un paso atrás. Seguí haciendo esto hasta que el borde de la cama tocó mi espalda ytropecé y caí. Intenté levantarme pero Slavik me agarró de los brazos y me inmovilizó. "Tu eres mi esposa. ¡ Te tocaré si me lo permites!.
Grité y traté de alejarme.
La ira salio de mi garganta, pero no era rival para él. "Déjame ir, quita tus manos de mi".
"Maldita sea, Aurora. Detente".
"¡No quiero que me toques con las manos que has tocado a esa puta!. Grité cada palabra, esperando que entendiera la indirecta y me dejara en paz. Ni siquiera sabía porque estaba tan enojada. No era como si tuviéramos un matrimonio normal.
No lo conocía y no me habían gustado los rumores que había escuchado. Cuando me entregaron a él, escuché lo que mi padre había dicho. No había querido entregarle a isabella, su preciosa hija, a este hombre pero a mí, estaba más que feliz de hacerlo.Todo lo que hizo fue profundizar en dolor de no se suficiente, nunca lo fui.
Me sentí tan... Humillada, no era lo suficientemente buena en anda para nadie.
¿De qué carajos estás hablando.? Preguntó
Grité cuando el me agarró un poco más fuerte de lo que estaba acostumbrada. Su toque me hizo detenerme, tratando de recuperar el aliento. Nada de esto tenia sentido para mí. Ni mi iría, ni mi sentimiento de traición.
Las amantes eran comunes en nuestro mundo. Sabía a dciencia cierta que mi padre tenía varias, sin embargo mi madre nunca hizo alguna escena.
Mis lágrimas se derramaron por la comisura de mis ojos y los cerré, con la esperanza de detenerlas y dejarme de sentir así. Odié todo esto, el dolor era más fuerte de lo que podía soportar.
"Aurora"
"Se que tienes mujeres" Dije.
"Lo haces, ¿verdad? Preguntó.
Con la forma en la que sostuvo mis brazos, no pude cubrir mi cara. No podía esconderme en ese momento, no había nada que quisiera más que ocultarme en ese momento.
Él no me dejó.
"Por favor, quítate de mí. Déjame en paz". Yo tenía el control ahora. No grité y pronuncié las palabras con calma.
"No, dijo" y esto me hizo abrir los ojos. "No iré a ninguna parte hasta que me digas que carajos fue todo eso".
¿ Por qué tuvo que suceder esto? Me sentí tan avergonzada.
¿Podemos olvidar todo?.
"Primero, llego a casa y veo que mi esposa a pasado la mayor parte del tiempo aquí. Abri la puerta y estabas apoyada contra ella. Intento hablar contigo y te asustas."
Lo sé.. tienes necesidades. No quiero que me toques con las mismas manos que tocaste a esa mujer, ni siquiera sabía quién era ella, pero la despreciaba.
"Tu eres mi esposa. Harás lo que te digan y te someterás a mi. No tienes ni voz ni voto, y si decido follar con otras mujeres, lo haré y aprenderás a vivir con ello.
Sus palabras destrozaron mi ser.
Me golpearon más que cualquier golpe.
No se de donde sacas tu información, Aurora, pero no tengo tiempo para joder.
"Desde que nos casamos, eres la única mujer con la que he estado." Se alejó de mi."¿Qué?" yo pregunté.
"Me escuchaste".
Me froté la sien, empezando a sentir el dolor de cabeza aproximarse. "¿No has estado con ninguna otra mujer?"
Slavik me miró fijamente. "Y si estuviera con otras mujeres, lo afrontarias".
" Entonces, ¿puedo tener un amante también?" Pregunté.
Me agarró la nuca con un gruñido, y me acercó a él. "No, ningún otro hombre te tomará jamás, Si lo intentas lo mataré.
¿Me entiendes? Si haces eso, firmarás tu sentencia de muerte."Slavik me empujó hacia atrás y aterricé en la cama. Había estado muy cerca y había sido una locura, pero en ese momento todo lo que podía pensar era que nunca nos habíamos besado. Ni siquiera después de que el sacerdote nos haya declarado marido y mujer. Me había besado en la mejilla.
Incluso la falta de pasión había sido sido algo de que hablar en nuestros días. La gente se reído de que ni siquiera podía soportar besarme en los labios. Nunca lo había hecho.Al tocar mis labios, no podía creer lo que sentía.
Lo odiaba, pero quería que me besara.
¿ Qué diablos me paso?
Claramente el dolor y los años de abandono, me habían afectado.
¿Como podía querer ser besada por ese tipo de monstruo?. Me puse de pie y salí del dormitorio. Con estos pensamientos dando vueltas en mi cabeza, el último lugar en el que quería estar era cuando el terminará en el baño.
Me escondí en el dormitorio de invitados y me quedé allí. No vino a buscarme durante el resto de la noche, me quedé en mi silla especial, deseando una vida que sabía nunca llegaría a mi.
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Caricias Peligrosas
Romance¿Qué haces cuando sabes que te van a asesinar? Sé que no soy la chica más elegante. Me odian. Nunca soy la primera opción. Me entregaron a un hombre letal y temible. Era muy guapo. Casada con el mundo de la mafia tengo que aprender a sobrevivir. Mi...