I'm hanging in your hands. [FINALIZADA]

Epílogo.

--¡Nos vemos!---, anuncio Uta con una enorme sonrisa en los labios para posteriormente mover su mano, frente a ella en la entrada del colegio se encontraban ambos padres diciéndole adiós, cuando la menor ingreso a las instalaciones ambos tomaron un taxi para ser llevados a sus respectivo trabajos.

Habían pasado ya 6 meses y la vida era mucho más tranquila ahora, después de aquel incidente algunas cosas había mejorado solo un poco, Uta tenía sesiones semanales las cuales se irían reduciendo a quincenales dependiendo de su avance con su psicóloga sobre lo que vivió en el secuestro, si bien no había sufrido heridas físicas, aquel terror psicológico podía llegar a ser lo peor. Durante las primeras semanas ambos adultos la habían tenido bastante difícil, ya que la pequeña se despertaba a causa de terrores nocturnos a mitad de la noche o de la madrugada, esto por alguna extraña razón le hacía recordar a Shanks aquel miedo que sentia cuando su hija era una bebé recién nacida, él desconocía completamente el mundo de la crianza, era un hombre viudo que debía sobrellevar la vida solo con su hija entre sus brazos, abandonado por la familia de su mujer que lo odiaba sin ningún motivo intentando arrebatarle a su pequeña, aquel recorrido había sido aterrador, sin embargo pudo superarlo una vez, pero ahora estaba dispuesto a mostrarse fuerte para que su adorada hija no tuviera miedo y de esa manera estuviera en calma.

Había veces en las cuales Shanks y Ben se quedaban toda la noche en la habitación de la pequeña, uno cuidaba la puerta mientras que el pelirrojo dormía con la menor aferrada a su cuerpo, si aquello le traía recuerdos un tanto melancólicos, pero ya no estaba solo. Sabía que tenía amigos que podían apoyarle, tenía a Mihawk que nunca le fallaba cuando lo necesitaba, además de contar con el gran amor de su vida quien estaba para él y su pequeña.

No iba a negar que amo a su esposa, era su alma gemela porque lo complementaba y le ayudaba a mejorar como persona, sin embargo también se hicieron daño mutuamente, eran humanos y los errores eran lo normal. Si amo a su alma gemela, pero estaba dichoso ahora de poder seguir teniendo al amor de su vida con él y su mayor amor acompañándolos, Uta y Ben eran sus mayores motores.

Debido a sus trabajos Daban, la vecina de la cuadra y quién alertó a las autoridades, iba a recogerla todos los días sin falta, la cuidaba con mucho gusto ya que la niña era muy dulce, caso contrario a los tres demonios que solía cuidar antes. Cuando sus jornadas laborales finalizaban ambos adultos iban por la pequeña para poder ir juntos a su hogar, aquello era una rutina agotadora si, pero la seguirían teniendo hasta que Uta se sintiera segura una vez más.

Shanks no iba a negar que hubo un tiempo en el cual se sintió perdido, colgando en el vacío aferrándose únicamente a la vida gracias a la existencia de su pequeña hija, si él colgaba en sus manos, pero ahora estaba de pie, estaba vivo porque Ben le había enseñado una vez más amar a la vida.

Era un camino difícil que estaban apenas comenzando, pero jamás se rendiría si iba de la mano de sus tesoros, Ben y Uta, su amada familia.

Fin.

Muchas gracias a todos aquellos que siguieron está pequeña historia <3 de verdad que me alegro poder escribir sobre está pareja que me gusta mucho, espero y les haya gustado, nos vemos, les mando ¡MIL BESOS Y ABRAZOS! Escritora fuera paz ❤️🐼