¿𝑨𝒎𝒐𝒓? ♥︎[𝑲𝒐𝒐𝒌𝑽]♥︎

𝐌𝐚𝐫𝐜𝐚𝐝𝐨.

𝑀𝑒𝑛𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑑𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑒𝑛𝑖𝑑𝑜+18

S𝒆𝒐𝒌𝒋𝒊𝒏.

Sentía que todo esto estaba mal, no debía besarlo así, no podía, pero aquí estaba, pareciendo tan urgido y necesitado de él, dejando que toque mi cuerpo de esa manera tan brusca y a la vez tan placentera, mis labios eran mordidos por él sacándome gemidos de dolor y placer, a mí no me gustaba el sexo rudo, pero no mentiré que ver su torso anteriormente provocó algo en mí y ahora sentir su cuerpo sobre mí y sentir su duro miembro sobre el mío me estaba dando vueltas la cabeza de la excitación que tenía encima, mi cuerpo ardía, era insoportable, pero no me importaba, la verdad lo estaba disfrutando.

𝑵𝒂𝒎𝒋𝒐𝒐𝒏.

Me era increíble lo que estaba haciendo con Jin, hace muchos años no he estado con un hombre, desde la primera vez con Taehyung, pero nunca lo disfruté, todo fue tan rápido, eran tantas mis ganas que no dure mucho y termine por decepcionarlo y a la vez sentir lo mismo por mí, pero besar y tocar a Jin era tan distinto, de alguna manera quería aprovechar el momento, al fin y al cabo a este punto dominaba yo.

Baje mis labios a su cuello y besé con pasión, mi lengua probaba su limpia y caliente piel, su olor tan varonil provocaba que mi pene brincara por la excitación, chupé y mordí el lóbulo de su oreja haciéndolo gemir, mis manos recorrieron su esbelto cuerpo, levanté su playera hasta su cuello y besé todo su torso dejando marcas nada discretas, chupé aquellos pezones rosas poniéndolos erectos, mi lengua entraba en calor por su piel caliente, llegué a su ombligo y sin dudar lami y mordí la piel, provocando que arquera la espalda, que deliciosa vista.

(𝗧𝗲𝗿𝗰𝗲𝗿 𝗡𝗮𝗿𝗿𝗮𝗱𝗼𝗿.)

Namjoon termino por quitar la playera azul de Jin y este lo ayudó alzando sus brazos, su boca no dejaba la contraria, sus lenguas luchando entre ellas haciendo el beso más obseno, con manos torpes el moreno desabrochaba el Jeans y bajaba el cierre, el miembro duro del castaño le daba la bienvenida, sin más lo sacó de la apretada tela del boxer negro y masajeo sin pudor alguno, Nam se sorprendió del grosor del castaño, era igual al de su hermano, con miembros gruesos, solo que la diferencia era que a los dos les gustaba ser receptor y por ello no se sentía mal, observando el rostro rojo de Jin mientras tenía los ojos cerrados disfrutando la estimulación de su gran mano, el moreno sentía orgullo de su control en saber disfrutar el momento y ver el rostro y escuchar los gemidos de placer del castaño, bajó sus labios a la punta de esté y paso la lengua por ella, limpiando el líquido preseminal de el, la salinidad de aquél liquido hizo que su pene brincara, a este paso ya dolía mucho, pero tenía que controlarse, quería disfrutar el momento, metió más el miembro de Jin a su boca y empezó a succionar, los gemidos de Seokjin se oian por toda la casa, agradecía que mando a su hijo a dar un paseo y no perturbarlo con los gritos del castaño.

La vista era tan excitante, ver cómo el castaño se retorcía de placer con solo comerle la verga Namjoon sentía orgullo y ansiaba ya estar metido entre sus piernas, haría que Seokjin nunca lo olvidara, lo follaría tan bien que el castaño se le haría difícil borrar las huellas de sus manos en su cuerpo y en el como lo poseyó tan duro y rico, era una meta y una promesa que se estaba haciendo a él mismo y a Seokjin mentalmente.

-No te vayas, anda quédate más tiempo, ¿Si?.-Taehyung jalaba del brazo al pelinegro quién reía por su comportamiento.

-Tengo que ir a la empresa, ¿te parece si te vengo a buscar en la noche y te llevo a cenar?.-Pregunto al caprichoso castaño.

-Esta bien, pero, ¿A dónde me vas a llevar para que me arregle bien?.-Lo miró con ojos coquetos, acariciando su musculoso brazo.

-Un restaurante a tu nivel, así que arreglate más guapo de lo que estas, muñeco.-Jungkook beso sus labios y a regañadientes se soltó de su mano para subir a su auto.

Taehyung se cruzó de brazos y lo miraba con un puchero, demostrándole que no estaba feliz que lo dejara ahí solo en su casa, ya que ni Jimin, ni su hermano estaban, pero en cierta parte entendía pese a su capricho, el pelinegro tenía que trabajar.

Saludo en despedida a Jungkook viéndolo irse en su auto, entró a su casa desanimado, fue directo a la sala y se tiró al sofá, tomó su celular y empezó a ver redes sociales, le era aburrido todo, se estaba acostumbrando al pelinegro, de pronto una llamada lo saco de su triste humor.

-Mamá, dime.

-Hola mi terrón de azúcar, te hablo por si tienes tiempo y llevas a tu anciana madre de comprás al centro comercial.

-Si mami, deja que me duche y te voy a buscar.

-Perfecto, amor, aquí te espero.

La llamada terminó y Taehyung se levantó del sofá, fue a su habitación, pero se quedó inmóvil al entrar en ella, estaba hecha un desastre y bien sabía porque, cuando saliera de bañarse le pediría a las chicas de servicio que limpiarán y cambiarán las sábanas.

Se quitó la ropa y se metió a la ducha directo, no quería hacer esperar mucho a su madre, la ventaja de salir con ella, es que siempre llegaba con ropa nueva y accesorios caros ya que su madre no tenía problemas en derrochar el dinero de su padre en sus hijos.

𝐶𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢𝑎𝑟𝑎...