Ring ring "Mierda de despertador" Miro el reloj y sí, son las 7:30 de la mañana. Tengo que ir al colegio, empiezo nuevo curso y tengo que esforzarme al máximo. Nada ni nadie me quitará el sueño de ir a medicina, y para ello necesito una nota de sobresaliente este año.
Bajo las escaleras corriendo, consciente de que voy justa de tiempo.
- ¿A qué viene tanta prisa, Estela?- ya estaba mi madre reprochándome mi rapidez
- Es primer día de clase y quiero empezar con todas las ganas del mundo. Además, me pica la curiosidad de ver con quienes me tengo que sentar...
- ¿Sentarte? Aaah, que vas a la escuela, yo creía que te dirigías al zoo- Soltó mi padre de repente, gastando bromitas tan temprano
- Já, papá, no tiene ni pizca de gracia.
Mi padre es un bromista de cuidado, pero también es un gruñón. Aunque hace honor a su nombre, Justo. Sin embargo, mi madre es la cara de la misma moneda: no suele hacer bromas, pero eso sí, tampoco se enfada demasiado conmigo, lo cual al fin y al cabo es una ventaja. Realmente su nombre también le viene de perlas: Dulce.
Mi instituto está a diez minutos en coche, así que mi madre nos lleva. Primero deja a mi padre en su oficina y luego nos vamos directamente al IES La Granja Pío, aunque mis amigos y yo solemos llamarlo cariñosamente "El Palomo".
En ese cuarto de hora que hay desde la oficina de mi padre a mi insti pensé en muchas cosas, pero no se me quitaba de encima ese sueño con la rubia... Y solté un leve suspiro
