Sin guantes en las manos.
Voy a la guerra con mis hermanos.
Sin temor a la muerte, soy humano.
Créeme ya mucho e sangrado.
A golpes yo fui torturado.
Y ese es todo mi pasado.
Y no es cuestión de suerte.
Esto depende del más fuerte.
No soy un sádico sin alma.
Pero pelear es lo única calma.
Incluso en mi último combate.
No esperes que me maten.
Desde niño llevo marcas de peleas.
Es muy fácil que las veas.
Siempre caminando sin temor.
Así es la vida de un peleador.
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susurros en la ciudad "melancolia"
Poetrysusurros que se cuentan en una pequeña ciudad, donde en cada esquina se escucha una nueva historia las culaes, pueden dejar un cierto sentimiendo de melancolia.
