Hola, tengo 17 años mi nombre es Astrid soy una chica tranquila, amistosa, relajona y sobre todo muy sencilla. Siempre me ha gustado jugar a las muñecas pero también me gustaba jugar con carritos y jamás pensé que eso era un gran paso a ser diferente. Yo lo veía normal ya que tenía hermanos y a una de mis hermanas también le gustaba.
Sin embargo, siempre me gustaban los chicos por que jugaba a la casita con un vecino que se llamaba Fer y nosotros eramos los padres mientras nuestros hermanos eran los hijos. Nos dabamos besos pero no con la maldad de ahora que si das un beso todo se alborota.
Cuando ya tenía apenas 10 años sentía otro tipo de atracción. Pero no hacia los niños como siempre, sino hacia las niñas. Me gustaba mirar su trasero pero pensaba a esa edad que era normal ya que algunas tenian su cuerpo formado. Pero no, aveces me quedaba como una tonta mirando a las chicas como sonreían por que se veían hermosas cuando lo hacían.
Jamás le dije a nadie lo que me estaba pasando hasta un tiempo que no pude aguantar.
Con el tiempo se me fue "yendo" ese sentimiento hacia las chicas.
Pero no fue así.
Todo comenzó de nuevo cuando tenia apenas 12 años que ya cursaba intermedia que es grado 7.
Para ese tiempo ya todas las chicas tienen su cuerpo formado. Yo era una chica que le gustaba relajar y andar buscando pleitos pero era defendiendo a los que no podían por eso en mi graduación me dieron un certificado de la mas peliona. En fin, alli trabajaba una guardia de seguridad que se llamaba Leonor, para mi era hermosa y para el colmo era lesbiana. Nos llevabamos muy bien. Ella siempre me aconsejaba y para todo lo que ella necesitará me llamaba solo a mi. Parece que se había enamorado de mi. Siempre quería comprarme comida por que se daba cuenta que yo no almorzaba o no comía en todo el día. Ella era amable y muy linda.
Yo estaba confundida pensé que todo lo que sentí cuando mas pequeña se me había "ido" pero no fue así. Mi corazón palpitaba a mil por horas cuando la veía pero yo debia parar esto que sentía por que mis padres no podían saber que me gustaban las chicas también, así que decidí hacer algo que jamás debí hacer.
Hablé con mis padres y les dije una mentira. Les conté que la guardia me hostigaba y que parecía enamorada de mi. Además que no soportaba eso por que me daba asco que una mujer me viera de esa manera. Mi padre quería hablar con ella pero le dije que no, que si ella llegará a acercase a mi le diría. Lo que hice fue muy cruel ella no merecía que a sus espaldas hablarán mal de ella y cosas que ella no ha hecho, pero tenía que hacer algo para ver si esto se me quitaba y que nadie fuera con el chisme a mis padres de que nos veían juntas.
Sinceramente me encantaba. Tenía el pelo lacio negro, sus ojos eran como la noche de oscura que combinaban con sus espejuelos y un cuerpo envidiable.
Ella era todo un amor.
Yo empecé a tratarla de lejitos para que nadie dijera nada.
Y asi fueron mis últimos años,me gradué para la escuela superior y solo la vi dos veces hasta ahora. Mi hermana menor cuando estudiaba allí me decía que siempre ella preguntaba por mí. Si la única que sabía de mis gustos era mi hermana Heather.
Al cumplir mis 15 años nos mudamos a unos apartamentos en donde al lado vivía una chica lesbiana(me perseguían) llamada Dulce.
Era de tez regular, pelo rizo negro y ojos café. Al principio no haciamos amistad con ella ya que mi madre no le gustaba ese tipo de "gente". Pero un día estabamos afuera y hablamos. Me gustó hablar mucho con ella.
Ella al principio no me contó sus gustos pero ya lo imaginaba. Pasaban los días y me empezaba a gustar mucho. A todas partes salíamos juntas. Ella se acostaba entre mis piernas pero lo malo era que tenía un hermano Pablo y parece que también le gustaba por que siempre trataba de alejarnos o sacarla de mi lado.
Con ella experimente diferentes cosas. Salíamos al parque en donde por primera vez fume un cigarrillo, a fiestas y a muchos lugares en donse nuestras miradas cruzaban y se notaba que habia amor entre las dos.
Un día yo y ella nos despedimos y me dio un beso en la mitad de mis labios. Yo quedé en shock y mi corazón solo gritaba que le devolviera el beso pero como era.
Al siguiente día de aquel evento, ella me contó que su hermano le había dicho que nos vio besar. Por supuesto ella lo negó y yo también.
Esa noche ella me invitó al cine, ibamos a ir ella y yo pero como siempre su hermano eran tan entrometido y se quiso ir. El caso fue que llegamos al cine y nos íbamos a centar. Nos sentamos juntas y ella puso encima de su mabo un suéter en donde ella jaló mi brazo para agarrar mi mano. Estaba super feliz de que ella hiciera ese gesto y sobre todo muy enamorada. Hasta que alguien lo dañó. Su hermano Pedro decidió que se iba a centar en el medio de nosotras por que ese asiento era el "mas cómodo"...
Mientras todos veían la película nosotras nos mirabamos y hasta por encima de la cabeza de su hermano nos agarramos la mano.
