Ahora mismo estoy llorando, estoy escribiendo esto con lagrimas en los ojos. Porque en este momento, las cosas no me van nada bien. Ayer hice el intento de cortarme, pero por desgracia no tengo el suficiente valor para hacerme realmente daño, a la vez quiero pero se que soy una cobarde y no puedo hacerme una herida tan sumamente profunda para que llegue a sangrar.
Cuando salgo de casa estoy "bien", con mis amigos, con la familia... Pero llegan las 23:30, termino de cenar, de desmaquillarme, de lavarme los dientes, y entro en mi cuarto... Apago las luces, cojo el movil, me tumbo en mi cama, me coloco los cascos y ya... Ya no soy esa chica que era al salir de casa.
Me convierto en otra, en una especie de monstruo, lo empiezo a ver todo tan negro que comienzo a llorar, y no puedo parar, me vuelve la ansiedad, no tengo pastillas para pararlo, tampoco quiero, agarro el cojín con todas mis fuerzas como si fuera alguien a quien abrazar, empapo el cojín de dolor bañado en lagrimas, quiero parar, así que me levanto, no me lo pienso. Sé dónde están las tijeras, la habitación está a oscuras, solo ilumina la luz tenue de la farola de la calle, suficiente, cojo las tijeras, me siento en el suelo, llorando desesperadamente, siendo consciente de lo que voy a hacer.