Los misterios del alma

Escalando

Pero que descortés soy, si ni siquiera me he presentado.

Bueno llevo 14 años en este mundo y no pienso vivir mas allá de los 27... No se, hay algo que me aterra de envejecer, es mi mayor miedo, no porque vaya a ser fea, no, si no porque todo eso me llevaría a la depresión y a la monotonía.

No se si me suicidare, no se si me matara una enfermedad y tampoco se si un idiota de primera lo hará.

Y si se lo preguntaban, si me imagino con hijos y casada con el amor de mi vida, pero solo eso. Amar, casarme, tener hijos y morir. Envidio tremendamente a los bebes, los miro con recelo, porque ellos tienen la oportunidad de vivir mas que yo.

Dejando ese tema de lado llamo Athenea y si como la diosa griega.

Pero lo que mas concuerda a mi personalidad es la guerra, a cualquier lado que voy lo destruyo.

Hay veces que ya me da igual todo, siempre sera igual.

Soy de esas personas manipuladoras, pero con el detalle de que no quiere ser manipuladora voluntariamente; mi ser, mi alma lo quiere así.

Hay veces que quieres que todo se apague alrededor tuyo y que te dejen morir allí.

Veo a través de mi fría ventana los arboles que cada vez pasan mas lento, nos estamos adentrando a la ciudad.

Estamos viajando con madre por décima segunda vez, ella espera que todo sea diferente esta vez, al igual que yo. Pero no me puedo dar el lujo de ilusionarme.

Saco mi cara de el frío vidrio de nuestro auto y miro el perfil de mi madre, cara alargada, ojos centelleantes color miel, cabello café, quizá un poco mas claro, labios ni gruesos ni finos, nariz fina, delgada y algo de respingada.

Debe estar cansada... hemos viajado por 22 horas, obviamente paramos para comer y dormir, pero, vamos, aun así es agotador. Miro mi reloj de muñeca y veo que son justamente las 10:00pm, hemos llegado temprano.

- Mama, ¿pintaron mi habitación de rosado o negro? - digo entrecerrando los ojos hacia ella, sus intentos para hacerme mas femenina siempre fallan.

- De negro - dice rodeando los ojos pero luego automáticamente sus ojos se vuelven a concentrar en la carretera.

- Genial - digo con una sonrisa de suficiencia en mi cara, al fin esta entendiendo mi obsesión por ese color - ¿Ya amueblaron todo verdad? ¿Solo tengo que desempacar?

- Si y no, debes desempacar, bañarte, bajar a cenar y luego estudiar ¿sabes que mañana tienes examen de naturaleza verdad?

- Si, ¿porque siempre tengo que hacer pruebas para entrar a la escuela?

- Porque ellos los quieren así - dice cortante, lo que significa que esta conversación ha terminado.

Miro de nuevo hacia afuera de la fría ventana y veo que empezó a llover, creo que en unos 30 minutos llegaremos a casa a si que me pongo mis auriculares y pongo la canción de Bring Me The Horizon ''Dont Go''

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Al fin llegamos a nuestra nueva casa, mis piernas y pies hormiguean por tener de nuevo el peso de mi cuerpo en ellas, bajo mi maleta y mi mama me pasa mis nuevas llaves, las de mi habitación y las de la casa.

La verdad es que la casa es muy grande y esta perfectamente decorada como a mi mama le hubiera gustado, tomo mi maleta aplicando mas fuerza en el agarre y las subo a mi habitación la cual esta en el segundo piso.

Abro la puerta de mi habitación y me siento complacida, es justo lo que quería.

Empiezo a desempacar mi ropa y a colocarla en el armario. Termino al cabo de unos 15 minutos y decido la ropa que me pondré, obviamente me pondré pijama vamos son las 11:30pm, dejo mi pijama encima de mi cama y me encamino a mi baño privado, también es lo que quería. Me quito la ropa que ocupe y la meto en el cesto que me compraron específicamente para eso, miro mi reflejo en el espejo, creo sentirme bien con mi cuerpo.