Sybil Davison es un genio de coeficiente intelectual, y ha sido cogida por lomenos por seis tipos diferentes. Me lo dijo ella misma, la última vez que estuvo visitando a su prima, Erica, que es mi buen amiga. Erica dice que esto es el gran problema de Sybil y su necesidad de sentirse amada -laparte de echar un polvo, eso es. Ser un genio de coeficiente intelectual es sólo suerte o los genes o algo parecido. No estoy segura de que sea 100 porciento una explicación correcta, pero en general Erica es muy buena en elanálisis de las personas.No sé bien desde que Sybil vive en la Cumbre y que nosotras vivimos en Westfield. Erica y yo decidimos ir a la fiesta de su Año Nuevo en el último minuto por dos razones: una, porque es cuando se nos invitó, y, dos, no teníamos nada mejor que hacer. Resultó ser una fiesta fondue. Había unos veinte de nosotros sentado en elsuelo alrededor de la mesa baja en la habitación de la familia de Sybil.Sobre la mesa había un par de grandes ollas de vapor y queso suizo líquidoy cestas con pedazos de pan. Delante de cada uno de nosotros había dos largos tenedores, para enlazar el pan, luego sumergirlo en el queso. Sabía muy bien. Yo había dado cerca de dos mordidas cuando este tipo dijo:
-Tienes algo en tu barbilla.
Estaba del otro lado de Erica, una especie de tendencia a través de ella. -¿Quieres que lo limpie?, tendió una servilleta.No sabía si estaba bromeando o qué. Así que le dije,
- No, yo puedo limpiar mi propia barbilla. -
y traté de tragar el pan que estaba todavía en mi boca.
- Soy Michael Wagner, - dijo.
- ¿Y? -Le contesté, y Erica me lanzó una mirada. Se presentó a Michael, yluego me tocó en la cabeza y dijo:
-Este idiota es mi amiga, Katherine. Note preocupes por ella... ella es un poco extraña.
- Me di cuenta, -Dijo Michael. Llevaba gafas, tenía un montón de cabello rubio rojizo y un lunar pequeño en la izquierda mejilla. Por alguna extrañarazón pensé en tocarla. Miré a otro lado y volví a pinchar dos trozos de pan. El tipo de mi otro lado,dijo,
-Mi nombre es Fred. Yo vivo al lado de la Sybil. Soy estudiante deprimer año en Dartmouth. - Desafortunadamente, también era un canalla.Después de un tiempo me di vuelta de él, pero él no se dio cuenta y siguió cotorreando. Estaba más interesada en lo que Michael le estaba diciendo a Erica. Me preguntaba a dónde iba a la escuela y la esperanza de que fuerabalgún lugar cercano, como Rutgers. Erica le dijo que estábamos deWestfield, que somos mayores, y que estamos pasando la noche en lo de Sybil. Entonces Michael le presentó a alguien llamada Elizabeth, y me di lavuelta a tiempo para ver que puso su brazo alrededor de esta pálida muchacha de cabellos oscuro sentada a su lado. Yo me hice la interesada en lo que Fred el canalla después de todo.
A la medianoche Sybil prendió y apago las luces y Fred me deseó un feliz Año Nuevo, y luego trató de hacer cosas con su lengua en mi boca.
Seguí apretando mis labios; mientras él me estaba besando yo estaba viendo a Michael besar de Elizabeth. Era mucho más alto de lo que pensé por primera vez y delgado, pero no flaco.
Después de la fiesta ayudamos a Sybil y a sus padres en la limpieza y enalgún lugar alrededor de las 3:00 am nos fuimos a la cama.
Sybil ronco tanpronto como apoyo la cabeza en la almohada, pero Erica y yo teníamos problemas para conciliar el sueño, tal vez porque estábamos en el suelo en sacos de dormir, o tal vez porque Sybil estaba roncando tan fuerte.Erica susurró:
- Michael es un buen tipo... no te parece?
-Es demasiado alto para ti, -Le dije. -Sólo le llegas hasta el ombligo.
-Él podría disfrutar de eso.
- Oh, Erica.Se apoyó en un codo y me dijo:
- ¿Te gusta, no?
-No seas tonta... apenas nos conocemos
- Me di la vuelta, mirando a lapared.
- Sí... pero puedo decírtelo de todos modos.
- ¡Duérmete!
- Él me preguntó por tu apellido y tu número de teléfono.Me di la vuelta.
- ¿Lo hizo?
-Uh huh... pero supongo que no te importa. -Ella se enterró el interior desu saco de dormir.
Le di una media patada. Luego nos reímos y me dormí.
Erica y yo somos amigas desde noveno grado. Somos una buena pareja porque ella es abierta y desinhibida y yo no lo soy.
Ella dice que tiene que ser así para compensar su tamaño. Ella es de sólo cuatro-diez pies así que cuando dije que llegaría hasta el ombligo de Michael no estaba bromeando.
Todos en su familia son pequeños. Así es como su bisabuelo obtuvo su apellido. Él vino a este país de Rusia, sin hablar una palabra de inglés. Así que cuando se bajó del bote, el hombre a cargo le preguntó su nombre, y él no entendía. En lugar de simplemente llamarlo Cohen o Goldberg, los oficiales de inmigración como lo hacían con tantos refugiados judíos,midieron a esta hombre pequeño tamaño y hasta escribió Sr. Small. Erica jura que si alguna vez se casa ella va a elegir a alguien tan enorme que, si deciden tener los hijos, los niños por lo menos van a tener una oportunidad de crecer a un tamaño normal.El teléfono sonó al medio día del día siguiente y me despertó. Sybil selevantó y corrió a contestar cuando ella regresó, dijo,
- Ese fue Michael Wagner.
Viene más para conseguir sus álbumes. - Ella bostezó y se dejó caer sobre su cama.
Erica todavía estaba fría.Le pregunté a Sybil,
- ¿No se va con esa chica, Elizabeth?- No que yo sepa... por qué, ¿te interesa?- No... Es sólo curiosidad.-... Porque me podría caer una sugerencia, si quieres que...- No... No.-Lo conozco desde el jardín de infantes.
- ¿Está en tu clase?
- Mi salón hogar.
- Oh... pensé que era más viejo.
- Es mayor... igual que nosotras.
-Oh...
- Él parecía mayor.
-Bueno... siempre y cuando este despierta podría también vestirme-Le dije, yendo para el baño.
Sybil y yo estábamos en la cocina cuando sonó el timbre. Yo estaba sacando unas pasas de uva de un bollo de desayuno, dejándolas en la esquina de miplato.
Sybil estaba apoyada en la nevera, tomando cucharadas de yogur de fresa del cartón. Ella abrió la puerta delantera y llevo a Michael a la cocina.
- ¿Te acuerdasde Katherine, no? -Le preguntó.
- Claro... hola... -Dijo Michael.
-Oh... hola, -Dije de vuelta.
-Tus álbumes están todavía abajo, -Le dijo Sybil.
-Voy por ellos por ti.
-Está bien, -Dijo Michael.
-Voy a buscar yo mismo.Unos segundos más tarde él llamó,
- ¿Quién es KD?
-Yo, -Le contesté. -Algunos de esos álbumes son míos. -Bajé y empecéa ir a través de la pila.
- ¿Los tuyos están marcados?
- No.Yo estaba haciendo un montón de K.D cuando dijo:
-Mira... - y me agarróde la muñeca. -Yo vine aquí porque quería volver a verte.
- Oh, bueno...
- Vi mi reflejo en sus gafas.- ¿Es todo lo que puedes decir?- ¿Qué se supone que tengo que decir?- ¿Tengo que escribir el guión?
- Bueno... me alegro de que haya venido. Él sonrió.
-Eso está mejor. ¿Qué tal un paseo? Mi coche está en frente.
- Mi padre viene a recogerme a las 3:00. Tengo que estar de vuelta paraentonces.- Eso está bien. - Estaba todavía sostenía mi muñeca