Inuyasha
Sabía que algo iba a pasar ese día fue diferente a los demás . No sentía la presencia de los demonios , el viento se había detenido , me sentía extraño era como si el tiempo se hubiese detenido , mi corazón se sentía desbocado . Estaba nervioso
Mis pies me llevaban a la aldea en donde estaba la perla de shikon , ese día me había decidido a robarla definitivamente sin embargo tras cada paso mi nervios aumentaban . Había escuchado por otros demonios que una poderosa sacerdotisa era la encargada de cuidarla pero ¿que tan poderosa? No creo que mucho , una mujer cienpies es una criatura insignificante si para ella la sacerdotisa es poderosa entonces yo soy un gran demonio - me preparo para saltar y atacar a dicha mujer - mi salto fue como siempre perfecto . La mujer usa el típico kimono, la pieza inferior rojo y la parte superior blanca con un gran sombrero de paja - creo -
-entregame la perla - le digo amenazante
- tendrás que matarme primero - me sorprendo pues su voz es firme y joven , se quita el sombrero y en efecto . Es una mujer joven de piel blanca , cabello negro y largo y ojos marrones
Me mira fijamente y sin temor . La muy insolente no me teme ¿no sabe que puedo matarla? Me concentro viéndola y en efecto su poder espiritual es superior a la de otros sacerdotes
- srita kikyo - llega una mocosa corriendo
-¿si pequeña?- le pregunta amablemente
-mi mamá esta mal - dice desesperada
-ahora voy- volte a ver a donde estoy pero ya me había ido . Desde que sentí el olor de la niña espere a que ella desviará su mirada para irme
Algo me dice que volvería a ver a esa mujer
