Todo comenzó un día de verano. Yo tenía 15 años recién cumplidos y mi vida hasta ahora ya había sido mala en cuánto a chicas y amigos. Ese año fui a un club donde reconocí a un viejo amigo. Enseguida me hice amigo de sus compañeros y hicimos una pandilla. Ese fue mi primer error, ojalá jamás le hubiera conocido, tal vez ahora estaría mejor, pero este es solo uno de miles de los motivos por los cuales haré lo que voy a hacer. Un día, por la tarde en casa de mi amigo, él se trajo una chica, inmediatamente sentí atracción por ella. Conseguí su teléfono, bueno, más bien ella consiguió el mio y aunque solo nos vimos dos veces rápidamente nos hicimos amigos. Aunque ella me atraía yo jamás le hubiera pedido que fuera mi novia, ya que a ella le gustaba mi amigo. Pero una noche hablando con uno de la pandilla me dijo que a él también le gustaba ella, y yo le dije que a mi de igual manera. Con poca sutileza le dijo a ella que me gustaba y eso la acabó de destrozar. No se que fue peor que él le dijera algo o que encima yo,después de todo hurgara en la herida y le dijera que el chico con quién había hablado estaba muerto de vergüenza. El caso es que volví a tener esa sensación de soledad y temor que ya había tenido antes. No sé que me atemorizaba más, dejar de ser su amigo o no poder hablarle más. Esto no acabó aquí, lo noté en aquel instante, pero ahora tampoco recuerdo como acabó.
