ME ENSEÑASTE A ODIARTE

capítulo 2 EL TESTAMENTO

Es hora de irme y no mirar atrás, mi dolor se convierte en odio y me empuja a caminar pensaba Samantha mientras una lágrima resbalaba por su mejilla y la quitaba bruscamente con el dorso de su mano <<nunca más, las chicas grandes no lloran, te vas a arrepentir algún día, de eso puedes estar seguro porque yo seré tu karma ¡lo juro!>>

<<pasajeros con destino a New York, vuelo 1540 por favor abordar>>

Un nuevo país, una nueva vida...

Samantha llegó a new york a enfrentar su destino, ella estaba huyendo de su pasado hasta ese día, por eso vivía en corea, su historia:<< hija ilegítima producto de un romance clandestino entre un empresario Estadounidense y la recepcionista de una de sus filiales en Latinoamérica, si ella era la hija del temible Robert Park dueño un conglomerado dedicado a las telecomunicaciones, cuando su madre Madeleine había enfermado gravemente le reveló el secreto de su procedencia entregándole un diario y un sobre pidiéndole que lo buscara y lo entregará.

Ella había aceptado poco convencida ¿Por qué buscar a alguien que nunca había hecho nada por saber de su existencia? Había cumplido con la última voluntad de su madre pero cuando lo encontró aquel hombre la echó de su oficina tratándola de oportunista, desde ese día maldijo tener su sangre: ella era y seguiría siendo Samantha Medina; no necesitaba su repugnante apellido para abrirse paso en la vida. >>

Pero nunca se pueden evitar los giros del destino, su madre había muerto y ella se había marchado de su país natal para vivir el sueño de Madeleine, dos años después en un país aún extraño para ella y con una citación para leer la última voluntad del hombre que se decía era su padre o mejor el donante de esperma como ella lo llamaba, a la espera de un cambio que la transformaría para siempre.

Llegó en un taxi hasta la dirección que le dio el abogado que la había contactado y ahí estaba ella frente a esa gran casa, más bien una mansión demasiado ostentosa, rodeada de hermosos jardines,que la hacían aún más imponente que le producía una sensación de peligro, estaba a punto de irse cuando un auto se detuvo a su lado y la dejó inmóvil por unos instantes, el vidrio de la ventana del lado del conductor se bajó dejando ver un hombre de más o menos treinta años de rasgos fuertes bien definidos, nariz perfilada, mandíbula firme y labios deseables; que le hizo contener la respiración ese hombre tenía una mirada que le produjo una sensación de estar en peligro.

-Tú debes ser Samantha-, dijo despectivamente, -sube para entrar-.

Ella no objetó nada y cuando subió al carro sintió que él la miraba detalladamente cosa que la hacía sentir muy incómoda, cuando llegaron hasta la entrada de la casa él la dirigió hasta el despacho donde ya estaban todos reunidos.

Se sentaron después de las respectivas presentaciones y el abogado empezó a leer el testamento, después de media hora la situación era la siguiente:

Para acceder al fideicomiso que su padre había dispuesto para ella,Samantha debía convivir con los Park por un año y lograr ser promovida a un puesto ejecutivo en el holding bajo la tutela de William Carrington .

<<el misterioso conductor tiene nombre...William Carrington...pensó Samantha>>.

William era el hijastro del segundo matrimonio de su padre según lo entendió a medida que el abogado leía el testamento y aunque no tenía la sangre de los Park se había convertido en la mano derecha de Robert Park; allí estaba también "su hermano" Bradley Park quien la había saludado solo por guardar las maneras del decoro y la buena educación,aunque no pudo descifrar la sensación que la invadió al notar su inquisitiva pero triste mirada muy diferente a la mirada cínica y calculadora de William.

Era bueno no olvidar la tensión que se sentía en el ambiente,si quería sobrevivir a la última humillación de ese despreciable ser que la engendró tramaba desde su tumba.

Después de la lectura Samantha tenía la sensación de estar fuera de lugar: por una parte la idea de poner en práctica sus estudios y más aún estar por encima de la fama de Kyle del cual había jurado se vengaría y por otro lado tener que ser vigilada estrictamente por su nueva familia.

-Me alegro que decidiera venir- la voz del joven abogado la sacó de sus pensamientos.

-Fue usted demasiado insistente-contestó Samantha
-Siento mucho que mi difunto padre fuera tan despectivo con usted hace tiempo cuando se entrevistó con su padre-

El abogado David Roberts trató de ganar un poco de confianza con Samantha,sabía de primera mano las intenciones de su amigo William y necesitaba prevenirla,algo en Samantha apelaba a su instinto protector y se prometió mientras la miraba y pronunciaba la frase que un día Samantha recordaría, él la protegería de todo, incluso del amigo que era como su hermano

-Si necesitas algo,lo que sea no dudes en comunicarte conmigo-.