Capitulo 13

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Dedicado a karenmiranda54738

KEILA:

Desperté a las 6:30 am, como siempre me fui a bañar.

Abrí la regadera y deje que el agua fuera recorriendo mi cuerpo durante un rato.

Me enjabone bien y volví a abrir la regadera.

Diez minutos después estaba en el cuarto de ropa buscando algo que ponerme.

Hoy hacía frío así que me puse un pantalón de mezclilla negro, una Sweater gris con um corazón en medio y mis Vans grises, unos lentes y un gorro gris.

«¿Por qué hará tanto frío en otoño? ¿Esto no se guarda para invierno

Salí de mi cuarto y baje a la cocina para tomar algo antes de irme.

-¡Andrea baja ya!

Andrea bajo, ella también traía ropa para él frío.

Nos subimos al auto, arranco y nos fuimos hacia el colegio.

Fui a mi casillero para sacar los libros que ocuparía hoy y dejar los de ayer.

Ya estaba cargada con lo que ocuparía hoy así que me fui a mi primera clase.

Formación sería muy aburrida si mi compañero no fuera el fantabulistico ponicornio James Mallers.

-Hey- susurro James.
-¿Qué?- susurre yo.
-¿Aburrida?
-Mucho

Y así nos pusimos a hablar con susurros hasta que termino la clase.

Las clases pasaron normal, aburridas y tranquilas, a veces me pregunto ¿Por qué nunca pasa nada fuera de lo normal? Y la respuesta es: Porque no estoy dentro del fantástico mundo de los libros.

Al salir James me dijo que quería hablar de algo, así que fui al patio trasero, ese nunca estaba abarrotado porque nadie lo conocía, al parecer lo abandonaron hace algunos años.

Estaba esperando a James cuando escucho que alguien me grita:

-¿Esperas al fantabulistico ponicornio James Mallers?

Era James obvio, solo el sabe que es un ponicornio.

-Hola Mallers
-Hola Johnson.
-¿De que quería hablar este ponicornio dorado?
-Te queria invitar un helado
-¿Y para eso tanta intriga?
-Si, es un delicioso helado en alguna afortunada heladería ¿Te parece?
-Okay, puedes recogerme hoy a las 5:00
-¿Es un cita?
-No es una cita.
-No es una cita.

Cuando quedamos de acuerdo se ofreció a llevarme ya que mi hermana Andy se fue por ahí.

Al llegar a casa me despedí y le di las gracias.

JAMES:

¡Tenia una cita con Keila Johnson!

Estaba tan emocionado que no pude evitar sonreír como bobo toda la tarde, al menos hasta las cuatro, ahí me puse nervioso.

Always RainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora