Prólogo

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Elinor corría por los largos pasillos del aeropuerto de San Francisco, California. Ella iba a toda la velocidad que sus delgadas piernas le permitían, el tiempo se iba reduciendo con cada paso que ella daba, su vuelo a Toronto se aproximaba cada vez mas y Elinor se sentía completamente nerviosa debido a que era la primera vez en sus diecisiete años de vida que viaja en un avión y tan solo pensar en la altura le ponía los pelos de punta.

Mientras tanto ahí estaba ella Lina, sentada en uno de los asientos esperando que se su vuelo saliera, ella era muy organizada y precavida por lo cual ya tenía el tiempo medido y había llegado con las dos horas de anticipación que los vuelos internacionales pedían. Lina se encontraba leyendo uno de sus libros mientras esperaba con tanta emoción dejar San Francisco por una nueva oportunidad de estudios en otro país, un viaje por el cual había estado esperando desde los trece años de edad, viajar a Canadá.

Elinor legó algo cansada y desesperada a los asientos de la sala de espera, el hecho de que tan solo su vuelo saliera en 20 minutos cada vez la hacia sentir mas y mas nerviosa, ella se sentó al lado de una chica la cual parecía estar disfrutando de una buena lectura mientras mantenía toda la paciencia existente del mundo, Elinor tenía tanta curiosidad por hablarle y preguntarle cosas a aquella chica de cabello castaño claro que al parecer tenía experiencia en viajar.

-Hola.- dijo Elinor con voz segura

-Hola.- dijo la chica sin despegar la vista de su lectura

-Me llamó Elinor Kerr.- dijo una de las chicas presentándose.- Se que posiblemente no te interese como me llamo pero es que estoy increíblemente nerviosa.

Lina cerró y guardó el libro, había algo en aquella chica que había captado su atención, al parecer era muy hiperactiva.

-No tienes porque preocuparte.- dijo Lina sonriendo.- Es un simple viaje, en cuanto estés sobre las nubes te sentirás como si hubieras perdido todo aquello que te preocupe y solo te concentraras en aquella linda vista, y créeme cuando te digo que es linda

-Es la primera vez que viajo en avión.- dijo Elinor tratando de que la platica con aquella chica la calmara un poco, finalmente ella sabía que su miedo a las alturas no la dejaría disfrutar el viaje.- En diecisiete años es la primera vez que hago un viaje, y este será un viaje muy largo.

-¿Así que también tienes diecisiete años?.- preguntó Lina mientras estudiaba a la chica, al parecer no era muy alta.- Me llamó Lina Jones, supongo que también irás a Canadá

-Es correcto.- dijo la otra chica contestando la pregunta.- Iré a Toronto, un año de intercambio en una preparatoria.

-¿También eres estudiante de intercambio?, no pensé que fueras también a otra escuela.- dijo Lina asombrada de que ambas chicas fueran al mismo destino para el mismo propósito

-Pasajeros del vuelo treinta y cuatro con destino a Toronto,Canadá favor de abordar el avión- dijo una de las señoritas que anunciaban las salidas.

Ambas chicas se levantaron de sus asientos y tomaron su equipaje, Elinor no podía estar mas nerviosa, el simple hecho de dejar su ciudad atrás la aterraba, pero Lina al parecer tomaba esto con una naturalidad increíble como si ella hubiera estado hecha para viajar sin importar lo lejos que estuviera.

Las dos jóvenes estudiantes subieron al avión donde casualmente les había tocado juntas en los asientos, el vuelo comenzó a despegar y con el San Francisco iba quedando cada vez mas atrás, pero ni Lina ni Elinor parecieron darse cuenta ya que ambas solo podían platicar de todo aquello que les esperaba en Canadá, de sus nuevos programas de estudios y de como sería el invierno. En el transcurso del vuelo, ellas solo parecían estarse haciendo más amigas, tenían tantas cosas que compartir y platicar que ninguna podía dejar de hablar.

Pero aquel momento llegó, aquel momento que marcó la vida de esas dos chicas, el momento mas trágico para algunos y el momento mas increíble para todos, el avión simplemente se hizo trizas en pleno aire en un abrir y cerrar de ojos, ningún pasajero supo que había pasado hasta mucho después.

***

Lina fue la primera de ambas que logró abrir los ojos, ella se encontraba en lo que parecía ser una cama hecha de metal, en el cual se encontraba amarrada y unos electrodos monitoreaban su ritmo cardíaco el cual se transmitía en un pequeño monitor, Lina volteó hacia el otro lado y pudo ver a Elinor que también empezaba a reaccionar, la pregunta que rondaba era ¿Que hacían ahí?, hace unos cuantos segundos ellas se encontraban en un avión y después tan solo despertaron en un lugar parecido a una base militar.

-Lina.- dijo la otra chica que se encontraba en la misma habitación.- ¿Estamos vivas?

-Al parecer si.- dijo ella tratando de averiguar ¿que había pasado y como habían llegada hasta ahí? .

Un hombre bastante alto entró en la habitación, vestía una bata blanca y al parecer el era el responsable de que se encontraran con electrodos en cada centímetro de su cuerpo.

-¿Quién es usted?.- preguntó Elinor mientras aquel hombre que parecía de mediana edad la desataba de aquel amarre.-¿Por qué nos ha traído aquí?

-Creo que la pregunta indicada es ¿quien eres tu?.- dijo el hombre sonriendo mientras le soltaba el amarre pero esta vez a Lina.- De hecho creo que deberían preguntarse ¿Qué son ustedes?

-Eso no contesta nuestra pregunta.- dijo Elinor con algo de enfado

-¿Queremos saber que estamos haciendo aquí?.- demando Lina

-Contestare sus preguntas.- dijo aquel hombre desconocido.- Pero necesito que escuchen con toda la atención posible.- ambas chicas asintieron y se sentaron.- Ustedes iban en un vuelo, un vuelo hacia Toronto.- ambas asintieron de nuevo.- Justo ese vuelo, justo ese avión contenía una bomba, una bomba colocada por uno de los terroristas y delincuentes más buscados del mundo, el avión donde ustedes viajaban se pulverizó en el aire.- hizo una larga pausa que causo un silencio incomodo.-Ustedes fueron unas de las pocas sobrevivientes, con tan solo un par de heridas sin importancia.

-¿Eso debería preocuparnos?.- pregunto Elinor.- Porque creo que ahora debemos de celebrar que estamos vivas

-Debería preguntarte.- dijo el científico.- Estuviste un par de meses en completo coma

-Eso quieres decir que.- comenzó a decir Lina.- Nos perdimos nuestro inicio de clases en Toronto, ¿Donde estamos ahora?

-Estas en lo correcto, ambas se han perdido los últimos dos meses de clase pero son nuestras únicas sobrevivientes. Ustedes están en Fresno,California en un laboratorio de investigación.- dijo aquel hombre.- Pero no tienen de que preocuparse, ahora que han despertado ustedes Elinor y Lina podrán irse a sus casa en San Francisco.

Ambas chica aun tenía muchas preguntas pero de inmediato fuero sacadas de aquel laboratorio y puestas en un auto con dirección a sus hogares, una vez en San Francisco ambas chicas intercambiaron sus números.

Los padres de Lina se alegraron tanto de que ella hubiese sobrevivido, le hicieron una celebración algo mal organizada pero aún así ella se sintió especial.

Tarde esa misma noche, Lina recibió una llamada, una llamada que al parecer era muy importante, pero a Lina no le placía contestar, se sentía demasiado mal como para si quiera tomar el teléfono, pero finalmente termino contestando aquella llamada de aquella insistente persona.

-¿Qué pasó Elinor?.- dijo ella algo irritada

-¿Puedes hacer algo nuevo?.- pregunto ella con desesperación

-Hasta el momento no.- hizo una pausa tratando de descubrir que había pasado.- ¿Por qué estas tan preocupada?

-Lina.- gritó Elinor desde el otro lado de la linea.- Algo extraño nos esta pasando


Secret To SellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora