Cesar entra al club, ve muchos chicos que estaban practicando, piensa que está viviendo una alegría inmensa que no lo puede explicar, su cara de feliz lo delata. En un momento el profesor llama a todo el equipo y lo llama: Cesar (llamándolo con un grito, él va y con una cara de tímido casi llegando asustado). El profesor lo presenta al equipo.
Profesor: Bueno chicos, tenemos un nuevo compañero para hacerle transpirar la camiseta (riéndose), su nombre es Cesar y viene a jugar y a entrenar como todos ustedes, trátenlo bien y apóyenlo. Si no sabe algunas cosas, ayúdenlo no se queden mirándolo o retándolo. Sean buenos compañeros y a jugar, saltar y disfrutar de esto que nos apasiona como lo es el Vóley. Ya pueden ir a entrenar.
Profesor: Hola Cesar, mi nombre es Gastón, ¿jugaste alguna vez Vóley?
Cesar: Un gusto, si jugaba en mi otra ciudad, de donde vengo.
Profesor: Ah ¿sí?, que bien, y... ¿Qué posición jugabas?
Cesar: Jugaba de armador, mi ex profesor decía que tenía un buen futuro si seguía jugando así.
Profesor: Bueno Cesar, no se hable más y vamos a ver qué es lo que tenés.
Cesar se prepara, se pone cómodo con un short y su musculosa y va a jugar con el equipo, el profesor lo prueba como armador y piensa ver como juga y si es cierto que era armador.
Cesar disfruta lo que está haciendo, empieza a jugar y siente que todo el fuego que había perdido volvió y pudo descargar todo lo que le había pasado, desde la mudanza hasta los tarados que lo molestan en la escuela, el volver a practicar le dio fuerzas para seguir, hay algo que Cesar no se daba cuenta, es que el profesor mientras jugaba lo evaluaba, como a todos, pero con más detalle a él , porque era nuevo y quería saber si en verdad era bueno como armador, al ver que disfrutaba lo que hacía y que jugaba bien decide llamarlo para hablar en privado.
Profesor: Cesar (con cara de felicidad), sinceramente, me sorprendiste. Tu profesor de allá tenía razón, vas a tener futuro.
Cesar al no poder creer lo que escuchaba le dijo: Muchísimas gracias, lo hago porque me gusta, no solo porque tengo que hacer un deporte.
Profesor: Muy bien, así se habla. Anda ponete cómodo de vuelta y volvé a tu casa. (Sonriendo)
Al salir de la oficina del profesor, va al vestuario y se sienta al lado de un chico, el chico lo había visto jugar y había quedado asombrado y decide hablarle.
Chico: Hola, me llamo Valentín y... ¿vos?
Cesar: Hola, Cesar (tímido)
Valentín: ¿Cuántos años tenés?
Cesar: 15... ¿vos?
Valentín: también, cumplí 15 un mes atrás.
Cesar: (al ver que había entablado conversación, siguió con las preguntas) ¿a qué escuela vas?
Valentín: mm a la nacional, ¿vos?
Cesar: mira qué casualidad (sorprendido), yo también.
Valentín: ¿En serio?, que bueno, ¿a qué curso vas?
Cesar: voy a 3ro "Humanidades", ¿vos?
Valentín: (pensando) Para, yo te conozco entonces. ¿Vos sos el chico nuevo que empezó el lunes? ¿El que se sienta atrás?
Cesar: (medio asustado) emm, sí, soy yo.
Valentín: (Contento) que bueno, yo te conozco entonces. Yo me siento al principio de la fila.
Cesar quedo pensando a ver si reconocía al nuevo chico que venía a hablarle.
Valentín: Cesar, esta noche nos juntamos con los chicos y unas amigas a comer en casa, ¿queres venir?
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Lo Mejor del Presente
Teen FictionLo Mejor del Presente trata de Cesar, un chico de 15 años que toda su primaria sufrió de Bullyng, a los 12 años sus padres se separaron y cuando apenas cumplió 15 su madre lo obligo a vivir con ella a otra ciudad, en el nuevo lugar encuentra amigos...