Gran dia

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Cuando por fin entramos, pude apreciar todas y cada una de las atracciones, era tan hermoso, no podía esperar.
Después de habernos subido a unos 5 juegos, tres de ellos montañas rusas, Jonathan estaba a punto de vomitas por lo que tuvimos que descansar un rato.
- Amor, si vomitas olvídate de que te valla a besar- se lo dije de forma graciosa, aun que era enserio, me miro divertido y asustado por el sabia que lo cumpliría.
- Lo se mi princesa, que te parece si nos subimos a un juego un poco menos extremo y rápido para que mi estomago pueda descansar?.
- De acuerdo, que te parece la rueda de la fortuna!- a varios metros podía apreciar una hermosa y muy grande rueda de la fortuna. Estoy un poco asustada, nunca había subido a una tan grande..
- Sara, estas asustada? - el idiota lo dijo con una sonrisa en su cara.
- Que? Claro que no, yo no estoy asustada, tu lo estas- comentario mas idiota no se me pudo ocurrir.
- Ven aquí princesa, yo te protejo- me tomo de la mano y me acerco a el, abrazándome, pasando su brazo por mis hombros y me dio un pequeño beso en la mejilla cuando simplemente me susurro - Te amo princesa- se me erizo el bello de los brazos debido a la cercanía de sus labios a mi oído, solo sonreí y lo abrase mas fuerte. Aun estaba asustada, pero con el a mi lado, me sentía mas segura. Me ayudo a subir, y el juego empezó a moverse tome su mano y la apreté, mira hacia afuera, todo era tan hermoso. Cuando me di cuenta que Jonathan me veía...
- ¿Por que me miras tanto?-
- Porque eres muy hermosa- me sonrió de manera tierna y dulce, algo apenado que lo descubrí mirándome.
Me acerque y lo bese.
Cuando el juego se detuvo en seco.

Una historia de amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora