El Suicidio De Mi Mejor Amiga

7 de septiembre de 2013

7 de septiembre de 2013
Dios, dios mio, dios mio dios mio. Tengo que contarte que hoy en la escuela mire a un chico, y dios mio, es el chico mas guapo que he visto en mi vida, es el chico mas hermoso, que he visto en mi vida.
No pude dejar de suspirar una y otra vez cuando lo mire.
Lo mire en la hora de receso, te juro que me morí de vergüenza al ver que me estaba mirando, porque yo comía un pan con relleno de chocolate, cuando lo mire me paralize, mis pies ya no sentían el piso, mi mente pensaba en una vida el y yo juntos por siempre, y mis ojos estaban en el, en el, en el y solo en el, en su cabello rubio, en sus ojos cafés, en su forma de caminar. Quite el pedazo de pan de mi boca, y oh dios, me miraba, me estaba mirando, no podía creermelo, simplemente no podía, paso de largo, no me toco y mucho menos me toco, pero mis ojos no podían dejar de seguirlo.
Voltee con Karen, mis ojos seguían abiertos, muy abiertos.

-¿Viste a un fantasma o algo?- dijo Karen.

-acabó de ver al chico mas guapo de el mundo.- dije.

-¿Enserio? ¿Donde?-

-Alejate, es mio perra.- dije riendo y quitando el chocolate de mis mejillas.

Ciencias, ciencias, ciencias, odio esa materia pero ahí estaba el chico del receso, el chico guapo del cpreceso, oh dios, el amor de mi vida, de todas formas estaba sentada ahí, hasta lo ultimo, con mis audífonos puestos, escuchando musica, haciendo en mi libreta garabatos.
Miraba a la maestra hablar y hablar sobre sabe que cosa, ni siquiera me interesaba, ya estaba reprobada, no había nada que me salvara.
Mire que todos aplaudieron como locos, ¿que diablos paso? ¿quien llego?
La maestra tomo una hoja de su escritorio y empezó a hablar de nuevo. Me importaba una mierda de lo que hablara.
Miraba que unos chicos se cambiaban de lugar y se iban hacia otro.
Entonces mire que ese chico guapo del receso se paro, observe cada movimiento de su cuerpo, cada hermoso y perfecto de su hermoso y perfecto cuerpo, lo se, he sido muy superficial. De pronto el chico empezó a caminar hacia donde yo estaba, mi mirada estaba clavandolo como un alcon a su presa y creo que eso le gustaba, no me miraba raro ni nada. Camino y se sentó a mi lado, junto cuando su trasero toco el banco me quite los audífonos tan rápido que casi me arrancaba las orejas, me quede viéndolo y dios era tan perfecto tan guapo, tan sexy. Me estaba viendo, dios, ¿que hago? Fue lo único que pensé, entonces Sonreí, como si nada pasara.

-Soy Sam, ¿y tu?.- dijo el. Su voz, me enamore completamente de su voz, era tan masculina, tan... Dios, era una mujeriego, se le notaba, un mujeriego como todos los otros, un mujeriego como cualquier otro, quería ponerme a llorar en ese momento, ¿otro? ¿otro mujeriego? ¿no hay demasiados ya en este mundo?
Se le notaba que era un hijo de puta.

-Soy Candice.- incluso con todo lo que pensé en menos de dos segundos, Sonreí, y dije mi nombre, mientras pensaba oh no chico, no seré una mas, así que cerré mi corazón y todos esos suspiros dejaron de salir por el, bueno, eso pensaba.

-Entonces, ¿que haremos?.- dijo. ¡¿Que?! ¿Este chico ya quiere algo? De seguro solo me quiere para un rato, no caeré en tu juego.

-¿Hacer de que?.- dije yo con una sonrisa entre dientes, no sabia que decir, esperaba una respuesta como "¿Vamos a lo oscurito?" pero dios no.

-Trabajo de ciencias.- Y en ese momento todas mis esperanzas de irme a lo oscurito con el se esfumaron.