Que ironía. Tu, que me hacías tan feliz y ahora me haces mucho daño, bastante daño.
Eso te da igual, ¿Verdad? Claro, como siempre.
No obtengo otra respuesta a mis preguntas hacia ti. Todo lo que me das es un "No me importa" o un "No lo se".
¿Sabes que nos pasó? Nuestra amistad y el amor se cruzaron y esta vez, a mi me toco sufrir, que suerte la tuya.