CAPÍTULO 18

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Los nervios la consumían y el frío estaba horrible,  temblaba como un títere y eso que tenía su abrigo. Con pasos temblorosos salió de la casa, tenía planeado agarrar su carro viejo.

Al abrir la puerta se quedó viendo a su alrededor todo estaba cubierto de nieve y el aire era frío que en tan sólo unos segundos sus labios estaban resecos, se talló las manos y caminó hasta su carro, ya era invierno, sacó sus llaves y abrió la puerta del conductor, entró y cerro la puerta.

No arrancaba, volvió a girar la llave y el sonido del motor queriendo arrancar pero se apagaba después de unos segundos, enfurruñada golpeó el volante y dio un grito al sentir su mano latir horriblemente, bajo del coche, se acomodo mejor en su delgado abrigo. Los jeans que usaba le quedaban algo grande, y la blusa manga larga aumenta un poco el calor junto con su suéter, se coló un mechón de cabello detrás de la oreja y suspiro más le valía que de pusiera en marcha.

La nieve caía como una brisa frágil y delicada, que poco a poco la fue cubriendo, la nieve impedía caminar rápido y se cansaba de dar largas zancadas. Recordó la silueta de la mujer al ver una sobre por el bosque, se sopló las manos para darle calor y mantener el calor en su cuerpo, se quedó quieta viendo la sombra difuminando.

Las palabras de la dueña del restaurante le llegaron a la mente "no entres al bosque"  no recordaba más pero con esas palabras era más que suficiente para no entrar al bosque. Siguio su camino hacia madame Loui.

Llegó temprano, para que le dieran instrucciones. Abrió la puerta y la campanilla sonó, diviso a marlene hablando con el cajero, esta se giró y le sonrió, Alexa le devolvió el saludo. Se sacudió la nieve y fue hasta donde estaba su amiga.

- buenos días Alexa -saludo marlene, y le tendió un par de ropa- ponte el uniforme, y después te doy las indicaciones

Alexa agarró la ropa y le dio una tímida sonrisa a Marlene, se fue hasta los baños y se cambio. Media hora después Alexa no se atrevía a salir del baño, el vestido le quedaba muy ajustado para su gusto y muy corto, hasta la mitad de sus muslos, dejando sus piernas pálidas al descubiertos, el vestido era negro, se miro al espejo toda avergonzada, dejó el mandil rojo sobre el lavabo y se tocó las  mejillas.

- tu puedes Alexa -se echó porras asi misma-  nadie se va a fijar en ti...

El sonido de la puerta ser tocada la asustó, dio un grito y se tocó el corazón que le latía tan fuerte.

- Alexa, cuando estés lista te esperó por la caja de pagar -la voz de marlene sonaba alegre, Alexa se intentó contagiar por esa alegría que parecía muy escasa en ella-

- si, ya...casi estoy -grito bajito, se puso el mandil y se amarró con una liga el cabello castaño-

Iba abrir la puerta cuando en esas escuchó por el pasillos voces, se concentró en entender la conversación, identificó las voces, era Darius, Damien....

Dio un paso hacia atrás por el miedo, no podían salir si el estaba ahí, jugó con sus manos con nerviosismo y respiraba agitadamente, se asusto más al ver la puerta del baño ser abierta.

- ten queda muy bien el uniforme -se sintió nerviosa al escrutinio de Marlene- bueno, sólo vas a tomar los pedidos -Alexa aceptó la pequeña libreta y el bolígrafo-

- muy bien...-susurro-

- ¿estas bien? Te veo un poco pálida...

- ah.. Si.. -sonrió con dificultad-

Las dos salieron del cuarto de baños, marlene la empujó levemente a donde la familia Serova estaban sentados. Estaba hiperventilando y las piernas le temblaban cada paso que daba rezaba para que no le fallaran.

Lo observó mientras caminaba hacia la mesa, Damien estaba mirando el menú y su novia... lo abrazaba, el parecía imperturbable como si no le importara o no tomara encuentra el gesto amoroso de la mujer, el Corazón le latía tan rápido que podía escuchar su palpitar en sus oídos, pensó que hoy se veía más hermoso y oscuro, tenía que dejar de pensar en el, ya que había dejado claro que no le interesaba en nada, el dolor la perforó en un santiamén, dejándola parada y mareada y parpadeo para despejar esa neblina gris, siguiente caminando pero antes de llegar a la mesa notó el semblante de Darius, triste ¿algo pasaba? Llegó hasta la mesa y puso una sonrisa falsa.

- buenos días, tomaré su orden -sonríe y no parpadees, se decía Alexa-

Pero fracaso al posar sus ojos en Damien Serova, el la observa con tanta profundos con sus ojos grises palatinados, su cuerpo reaccionó a aquella caricia.

- oh por dios -la voz alegre de Darius hizo que Alexa lo mirara el- estas sexy, yo quiero sólo una tasa de café

Alexa anotó en la libreta, y le dio una sonrisa cariñosa a Darius, vio que él ladeó una sonrisa, eso la preocupó mucho quería preguntarle qué le pasaba pero no podía hacerlo en frente de Damien.

- yo quiero el desayuno francés y un café suave

Lo anotó pero no paso desapercibida la mirada de desprecio de Yvett, no sabía porque la mujer le caía mal si no habían entablando una gran conversación. Sus ojos chocaron y Alexa se perdió en esos ojos grises.

- quiero el desayuno clásico y un café expreso -él la recorrió el cuerpo otra vez y pudo escuchar un gruñido eso la puso roja-

- en unos minutos les traigo su desayunos, con su permiso.

Salió de ahí casi corriendo, podía sentir la mirada de él sobre ella y no pudo evitar voltear a ver, el se la quedó viendo sin restricciones y un brillo en los ojos como si.... Como si... Quisiera comérsela.

•••••

Bueno OS subo un capítulo pero corto muajaja soy mala jajajaja intentaré que próximo sea más largo, todas querían otro así que como estoy feliz ya me tocó un buen día y hora para mi renscripcion este es el últim que subo hoy de ahí hasta la otra semana

1° Reclamada por el Alpha(SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora