Mila era divertida y soñadora como todas las chicas de su edad, a sus 22 años tenía toda una vida por delante amaba a la naturaleza, y los animales les inspiraba tanta ternura, que aveces llegaba a casa con algún gato o perro desamparado su madre le había puesto un ultimátum ningún otro animal seria aceptado, tenía un zoo en la casa le había dicho ella, ya es suficiente.
Cada día se esforzaba por ser mejor persona no solo ayudaba aquel pobre animalito abandonado sino que también,iba por la vida ayudando a las personas de la forma en que podía aveces le compraba algo de comida a las personas sin hogar o cedía su asiento del bus a una persona de la tercera edad o mujeres embarazadas siempre pensando en los demás antes que en ella. Mila era hermosa aunque ella siempre le restaba importancia; tenía unos ojos grandes color miel que heredó de su padre y un lunar justo a lado de su boca que lucia coqueto cuando ella sonreía, su cabello castaño caía hasta sus hombros lo que hacia que pareciera mas hermosa, su era delgado lo que le daba una apariencia frágil. Mila vivía en una pequeña casa con su madre Sara; la cual era enfermera por suerte de Mila que siempre se lastimaba con cualquier mal paso o tropiezo digamos que no era muy hábil. Sara casi nunca estaba en casa siempre doblando turnos en el hospital o cuidando de algún enfermo, Mila estaba orgullosa de su madre siempre se lo decía que le había tocado la mejor madre del mundo....-despierta, vamos tu puedes, concéntrate....
Esa cosa estaba arriba de ella y no la dejaba moverse, Mila luchaba por despertar sabia que estaba soñando, una parte concierte de su cerebro le decía que era una pesadilla que eso no era real, pero se sentía tan real, tan espeluznante que hacia que su cuerpo se estremeciera, escuchaba como ese animal rugía de manera amenazadora y sentía más miedo...se preguntaba si al menos su madre entrara podría tocarla y despertarla pero no estaba allí ella seguía en el hospital...ufff se concentró en mover uno de los dedos de la mano y funciono solo tenía que concentrarse en mover mas los dedos y la mano pero era tan difícil....
-vamos, ya casi....ufff si! Por fin... Pero que pesadilla tan horrible he tenido.-
Se levanto de un Salto de la cama ordenó su cama se duchó, tomo una manzana grande y roja y salió rumbo a la universidad, mientras caminaba esa mañana se preguntaba cuando terminaran esas pesadillas tan sofocantes que la atormentaba o si, todo el mundo tenía esa clase de sueños. Pero ella sabia que esos malos sueños habían empezado hace dos años atrás, ella sabia lo que había hecho, aveces se preguntaba que habría pasado sino hubiese tomado aquella decisión, aquella mala jugada del destino...
Una voz la saco de sus pensamientos..
- ehh Mila, por aquí! he comprado las últimas dos donas con azúcar que quedaban, casi pierdo la vida peleando por ellas con josé, pero a la final he ganado yo!Decía Samuel con una gran sonrisa era el mejor amigo de Mila, era lindo y guapo la mayoría de las chicas se morían por el excepto Mila la cual le brindaba una sincera amistad, no quería pensar en chicos ellos siempre traían problemas, solo quería estudiar y ser una excelente doctora, el gran sueño de su madre ..
-uff gracias, sabes que amo estas donas son deliciosas, te ganaras el cielo...- dijo Mila mientras mordía la dona y se sacudía los granos de azúcar de su camiseta.
Samuel se reía con dulzura, sabia de las pesadillas de Mila y hacia lo posible por alegrarle los días.
- sabes que lo hago con gusto, vamos se nos hace tarde para entrar a clase-
El día paso muy rápido como de costumbre entre clases y tareas ambos trataban de mejorar sus notas y mas Samuel que no quería defraudar a su abuela que se había hecho cargo de el desde que era un bebe su madre lo dejo con ella cuando el apenas tenía 4 años y su abuela lo había criado con gran amor y cariño y Samuel quería retribuirle siendo un gran doctor.. Ese día Samuel se despidió de Mila temprano porque tenía que llevar a su abuela al cardiólogo tenía que darse prisa para alcanzar a tiempo la cita, Mila le dio un abrazo y le deseo suerte...
Mila empezó a caminar rumbo a su casa, todo parecía tranquilo una buena tarde...entonces algo debajo de un auto le llamo la atención era una pequeño gato de pelaje blanco y enorme ojos azules, aullaba parecía perdido y asustando.
-Aww que hermoso gatito, tranquilo, ven aquí, gatito, gatito- de pronto un auto paso y el ruido asusto mas al pobre gatito que salió corriendo al lado contrario, Mila al ver que el gatito se dirigía al tráfico corrió tras el para salvarle de una muerte segura, y logró atraparlo lo tenía en las manos, feliz porque había logrado salvarlo... Entonces giro y un auto venia a toda velocidad impactándola, su cuerpo choco con el vehículo dio un par de giros en el aire como si fuera una muñeca de trapo y callo en el asfalto golpeándose la cabeza.
todo paso en cámara lenta que pudo ver al pequeño gatito escurriéndose debajo de un autos y mirándola con esos ojos azules desconcertado y fue lo ultimo que vio antes de cerrar los ojos.... Mientas una gran multitud se acercaba a mirar y llamar una ambulancia..
ESTÁS LEYENDO
El descenso
Mystery / ThrillerDeberías tener miedo, si supieras lo que te aguarda en la oscuridad. Lamiéndose las fauces esperando por ti, una bestia sin forma con escamosa piel y ojos ardientes como dos llamas..ese es tu castigo por haber cometido aquel pecado..y esta ansiosa e...