El inicio de todo

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CAPÍTULO I

12, agosto 1997

Hacia frío en la ciudad de nevada, así que decidí salir mas que abrigada, llevaba un Jean negro con un cinturón plateado, mis botas negras de militar y una chaqueta de cuero, por dentro una camiseta de mangas blanca, baje las escaleras casi trotando, agarre mi celular en la mesa que estaba en el espejo y las llaves de mi moto, vida que mi padre y su esposa estaban cenando junto con Andy, mi padre ni se inmuto, nibun gesto, ni sonidos, nada... A mi se me hacia costumbre eso la verdad a veces si dolía pero otra veces se me hacia de lo mas normal, el siguió con lo suyo y yo salia hacia la puerta principal, al abrir la el viento de nevada me golpeo quise que hiciera sol pero no, las nubes medias negras tapaban el sol, acaricie mis brazos para calentar me un poco cerré la puerta detrás de mi y encendí un tabaco, para calentar me un poco, me subí a la moto mientras fumaba, y Sonreí inconsciente pensé que la esposa de mi padre era un travesti tenia tantas operaciones que no se me hacia imposible, de ves en cuando se le escapaba un ruido masculino cuando tenían sexo, por lo que yo tenia entendido, ese hijo no era precisamente de los dos, ella ya lo tenia cuando se casaron, esa boda fue muy divertida, aun recuerdo que era la única loca, con un vestido negro y mis botas y fumando dejando colillas en todas partes, mi padre estaba mas que colérico, jamas me lo perdonó y aun me mira con decepción desde ese día, cuando me acabe en tabaco Prendí la moto y vi a Andy asomado en la ventana viendo me partir, el se despidió de mi pero yo solo bote el tabaco y lo pise, arranque la moto y cuando salí en camino, sabia que me seguía mirando, así que le saque el dedo del corazón, Sonreí y me adentre a las calles, me gustaba fastidiar lo de verdad a veces me perturbaba era demasiado raro ese chico, tan perfecto, tan limpio, tan obediente me aborrecía esa actitud, a veces se portaba gentil conmigo y eso en ocasiones me enfurecía, nunca necesite ayuda de nadie y mucho menos necesito ayuda ahora y peor de ese embecil, ¿Que se cree?

- Hey hermosa, ¿a que hora abren esas piernas?

No respondí, era mas inteligente que eso, lo mire y Sonreí, la luz seguía en roja y acelere.

- Quien llegue al otro semáforo primero gana lo que quiere.

- ¿y que ganarías tu? Si es que llegas a ganar .- se uno junto a su compañero

- Tu auto...- mire el semáforo faltaba poco- un buen sexo, por el auto, ¿que dices?

- hecho, el auto por ese pedazo de carne toda un mes

- ok, me parece justo.

El semáforo aun estaba en rojo el chico no dejaba de decir idioteces sobre que le haría a mi vagina, pero yo solo sonreía, cuando se puso en verde arranque avanzando mas que ellos, las llantas de la moto rechinaron sacando humo y dejando una marca en el frío asfalto, me faltaba poco para llegar íbamos a la par un carro se le atreveso a mi oponente al igual que a mi, pero fui mas ágil y lo esquive, llegue a la meta y me detuve en frente de ellos bloqueándo su paso.

- Llaves, por favor.- Sonreí divertida, en mi interior no necesitaba el carro pero era un carro gratis, ellos perdieron , un auto por mi vagina , si muy sabia que habían personas idiotas y habían personas como ellos.

Me lanzaron la llave y la agarre ellos se bajaron yo deje la moto parqueada en un garaje mientras subía al carro y lo metía al mismo garaje después vendría por el cuando lo neesitece, por el momento ellos iban a andar a pie, les guiñe el ojo y me subí de nuevo a mi moto, y seguí con mi camino, había acordado algunas "entrevistas de trabajo" no era nada del otro mundo, de seguro iba a conseguir el primero.

Camine hasta el letrero que decía se busca camarera, lo agarre y lo lleve adentro, el señor no lo pensó dos veces, me dio un delantal con un vestido de camarera, un lápiz, algunas tablas de ordenes, y una libreta en donde anotar, lo mire y el me señalo con la mirada el baño, me dirigí a el a cambiar me de verdad era un tanto pequeño pero igual cargaba mis botas, salí del baño con las cosas en la malo.

- Por el momento atenderas a los clientes, te pagare cada día, dependiendo de cuanto tiempo te quedes y que tal hayas trabajado, si no me gusta como atiendes a los clientes te echaré y no te pagare. No eres delincuente verdad, no pareces ser lo, anda trabaja, la mesa 3, 6, 9 y 16 necesitan que las a tiendas, toma su pedido y traes acá después las llevas , ¿Entendido?

Solo asentí de manera despreocupada, tome las cartas y la libreta, tome las ordenas de cada mesa, y sirviendo como debía, de ves en cuando alguno que otro señor intentaba manosear me y yo solo le mostraba que sabia manejar perfectamente una navaja que se encontraba en mi bota metida, termine el día limpiando mesas, en realidad no había sido tan malo, pero estaba agotada, metí mis ropas en una funda y tome mi dinero, tenia que regresar mañana eso era lo peor de todo, me puse la chamarra encima de la ropa de trabajo y subí a mi moto de verdad hacia frío y mas aun que era de noche, y este vestido no me cubría mucho que digamos, dejaba toda mis piernas al descubierto, y me hacia estremecer del frío maldije en silencio y tome otro tabaco, este me calentó por unos segundos Prendí la moto y me dirigí hasta mi casa, cuando llegue había gente hay, desconocida, mi padre se interpuso para que ellos no me vieran.

- Por favor, hay un vestido en tu pieza, de ante mano, lamento haber entrado sin tu permiso, quiero que estés aquí abajo en 15 minutos, por favor, te daré lo que quieras lo que me pidas, comporta te como una mujer sabía y discreta en ciertas situaciones.

No hice nada mas que caminar, el suspiro esperando lo mejor de mi parte, estaba dudando en hacer lo o no la verdad me daba cólera bajar con todos esos hipócritas, de verdad quería quedar me durmiendo pero podía hacer, le podría pedir lo que fuera, y quizás así podría ganar mi apartamento propio y el por fin Se libraría de mi, decidí hacer le caso por primera vez en mi vida, tome una larga pero diminuta ducha, los 15 minutos que me había dado no era suficiente, quería por lo menos tener una hora bajo ese manantial de agua fresca, tuve que salir a regañadientes de hay, me unte crema en todo el cuerpo y una loción corporal, me colé el conjunto de interior negro y después el vestido, era de color negro que era lo bueno así no sufriría tanto, así que me puse tacones negro, el vestido tenia unos adornor en la base del pecho de color plata y dorado, dejaba al descubierto mi espalda y formaba a la perfección mi cintura, y realzaba mi busto.

Baje las escaleras mientras me acomodaba en cabello en una simple cola de caballo, mi padre me vio y por primera vez en mi vida, había visto ese brillo en sus ojos al ver me bajar vestida de ese modo, algunas chicos tan bien me quedaban viendo, también habían chicas de mi edad, mi padre se acercó a mi y me dijo al oído.

- cuidarlo, esta fiesta la organizo Andy y necesitó a una persona de confianza y ruda para que no roben nada, Sará y yo tenemos que salir a una reunión.

- Esta bien, me quedare aquí, te saldrá caro eso lo único que te digo.

- esta bien, sabré recompensarte como se debe.

Se fue dejando me en medio de testosterona y maquillaje barato, el ambiente era pesado, se notaba la tención sexual entre muchas de las personas, las chicas bailaban pegadas a los hombres de verdad aborrecía lo que ellas hacían, venden ser a un hombre que no las quiere mas que para sexo de una noche...

Encuentro SangrientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora