p r o l o g u e

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" Son las 4:30 a.m., estoy sentado en uno de los bancos que se encuentran en el parque en el cual acordamos vernos cada vez que nos sintierámos solos.

Te escribo esta carta mientras espero tu llegada, sin embargo, tienes media hora de retraso, lo cual es sorprendente teniendo en cuenta el hecho de que eres la persona más puntual que he conocido a lo largo de mi paso por este mundo, supongo que ya no vendrás.

Prometimos nunca dejar al otro solo, sin embargo, poco importa ahora lo que nos hayamos prometido.

Sigo esperandote mientras la luna poco a poco se va escondiendo y empieza a dar paso al crepúsculo, y es que comienzo a creer que siempre te seguiré esperando, no importa cuánto tiempo pase.

Mi cerebro comprende a la perfección el motivo por el cual no vienes, desafortunadamente, mi corazón no lo puede aceptar, corrección; no lo quiere aceptar.

Supongo que es hora de que te deje ir completamente, supongo que es momento de que vaya a casa y acepte el hecho de que ya no te podré encontrar en este parque a las 4:00 a.m., es tiempo de aceptar que no volverás a estar a mi lado para apreciar el amanecer juntos.

He decidido dejar este frío banco para ir a refugiarme en la oscuridad de mi habitación, está más que claro que no vendrás.

Y justo después de tomar esta decisión, ese pájaro que cantaba para recordarnos que era testigo de nuestros pequeños encuentros lo vuelve a hacer, aunque en esta ocasión solo evoca un pensamiento completamente opuesto al anterior, solo me recuerda la soledad en la que me encuentro.

Entonces toda la voluntad que había reunido para dejar tu recuerdo en el pasado, se esfuma y encuentro que no sería tan malo seguirte esperando, al menos por un poco más de tiempo.

Olvida esa última parte, sabes que te seguiré esperando hasta que ambos podamos encontrar nuestro camino a casa."



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Canciones utilizadas:

*4 o'clock by V and RM

Lost StarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora