Capítulo 5

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Sky alargaba su brazo hasta el alien, dió un paso al frente y tropezó con una piedra, el alien se desperto inmediatamente y nos empezó a perseguir, Sky se paró cogió el arma y le disparó, el ser se desintegró quedando solo la planta, fuimos corriendo a la nave antes de que vinieran más, cuando llegamos a La Tierra nos comimos el fruto entre los dos hasta llegar al hueso.
Muchos al llegar hasta este punto de la historia os preguntaréis ¿dónde están mis padres? Para ello retrocedamos a la noche anterior

-Padre-Hija tu madre y yo hemos decidido pasar mañana el día en un parque de atracciones, para celebrar que ya llevamos 20 años casados, puedes invitar a algún amigo
-S-*pensando* ¿y de dónde me saco yo el amigo si no tengo?
-S-Claro papa que te diviertas
Bueno volviendo a ese día tan extraño.
-S-Eres capaz de tragrte el hueso del tirón, a ver si te vas a atragantar
-Sk-Los alienigenas tenemos garganta grande, tu relájate
El pobre Sky no se dió cuenta de que ahora estaba en forma humana y se atragantó. Detrás de nosotros (estábamos en un parque) vino un hombre lleno de sudor no muy agradable para la vista, nos vió vino corriendo y hasta ahí puedo llegar, ese momento fue algo asqueroso, horripilante, incomodo pero heroico.
Cuando caminábamos hacia mi casa le pregunté
-S-Oye cuando me dijiste lo de como convertir a un alien en humano, en el paso 9 había que darte el beso de amor verdadero ¿eso quien te lo va a dar?
-Sk-Samantha Johns *se agachó* me harías el honor de mañana a las doce de la noche darme un beso de amor verdadero, porque eres mi único y verdadero amor
-S-¡Acepto! ¡Te amo!
Mientras pasaba eso el hombre nos miraba apunto de llorar y con necesidad de darse una ducha.
Fuimos al río más bonito de la ciudad, tuvimos la suerte de que no viniera nadie, solo nosotros, abracé a Sky con todas mis fuerzas por si algo saliera mal y se tiró al agua, esperé que pasaran los diez minutos, en cuánto sonó la alarma que había puesto al móvil me tire al agua y le rescaté, hay que añadir que lo más bonito fue hacerle el boca a boca y ver como abría los ojos y sacaba su preciosa sonrisa. Estaba ansiosa para que llegarán las doce, mientras esperábamos le enseñe cosas de la vida humana. Pasados dos horas miré la hora, eran las 20:45 pensé que mis padres vendrían en cualquier momento y yo no estaba en casa, cojimos un taxi y llegamos justo cuando vi el coche de mis padres, ese momento fue más incomodo que el de antes, ahora os diré porque

No todos los aliens son malosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora