Capítulo único

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A que no sabes donde he vuelto hoy... 

Donde solíamos gritar.

Frío.

Frío calándose entre mis desnudas piernas y mis brazos, traspasando la fina tela de mi vestido, acariciando con ternura mi rostro y golpeando con fiereza las hebras de mi cabello. Era el primer día de Enero y no estabas junto a mi. Es el primer día de Enero pero te siento junto a mi. 

¿Cómo llegué aquí? 

Yo solo quería gritar, así... Como me enseñaste tú.

Diez años antes de este ahora sin edad, 

Aún vive el monstruo y aún no hay paz. 

Eramos muy jóvenes para saber que en ese entonces eramos libres de todo mal, demasiado estúpidos para pensar que nunca tendríamos nuestro futuro ideal, eramos demasiado ignorantes sin sospechar que la muerte nos respiraba en la nuca. 


Y en los bancos que escribimos 
medio a oscuras, sin pensar, 
todos los versos de "Heroes" 
con las faltas de un chaval,
aún están. 

¿Te acuerdas que me esperabas siempre en la tercera banca del parque que empezaba desde la derecha, la que justo estaba frente a un basurero? He pasado por ahí hoy, me he sentado y he acariciado los bordes, nuestra letra sigue ahí, intacta como si nunca hubiese pasado nada.


Y aún hoy, 
se escapa a mi control, 
problema y solución, 
y es que el grito siempre acecha, 
es la respuesta. 

Un sonido desgarrador sale desde el fondo de mi ser, ¿Era un grito? No lo sé, quizá era eso o mi propio sufrimiento ya había tomado control sobre mí y estaba haciendo estragos.


Y aún hoy, 
sólo el grito y la ficción 
consiguen apagar 
las luces de mi negra alerta. 

No logré sentirme tan bien como antes, a pesar de que el grito siempre fue nuestra respuesta. 

A pesar de haber gritado (O al menos de haberlo intentado) Sigo en la posición de antes, parada en este monte el cual bautizamos nuestro, nosotros eramos los reyes del mundo Matt, eramos los amos de los planetas. 

Sigo quieta, con mis dos pies sobre la Tierra pero con mi mente en perdida en mis recuerdos, ¿Ha pasado un año? Ya ni siquiera recuerdo... O creo que sí, eres el motivo de que en estos momentos lleve un estúpido vestido negro y no mis clásicos jeans con camisetas mangas largas de colores vivos; por ti usaría mil vestidos para la ocasión, pero solo de un color: Negro

Tengo un cuchillo y es de plástico 
donde solía haber metal, 
y el libro extraño que te echó de párvulos, 
sus hojas tuve que incendiar. 

Nuestra relación era más solida que cualquier pareja mundana que se promete amor y no lo siente, más solida que la de los hermanos que crecieron juntos, nosotros eramos más que todo y menos que nada, no teníamos nada romántico y aun así nos amábamos a nuestra manera; Matt eras mi todo y mi nada, a pesar de que en ese tiempo tenía pareja, yo te hubiese preferido mil veces antes que a todos.

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⏰ Última actualización: Aug 16, 2015 ⏰

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