Bienvenida

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Mi despedida con Anne y Samuel fue muy corta, ya que al igual que siempre, iba tarde, cuando subí al avión una oleada de nervios me invadió, me encontraría con muchas personas que habían conocido a mi padre y con personas que quizás yo había conocido pero no recordaba. Tal vez amigos del jardín de niños... Todo mi pasado se encontraba en este lugar y eso era lo que más me aterrorizaba.

Al llegar al aeropuerto vi a un hombre que se me hacia familiar, estaba vestido de traje y con gafas, era muy mayor, quizás tendría unos 80 años, su cabello, de no ser por unos pocos mechones negros, seria completamente blanco. En sus manos sostenía un cartel que tenía escrito mi nombre.

-Hola, disculpe, ¿es usted quien va a llevarme a la universidad? -Dije intentando ser lo más amable posible.

-¿Amy Anderson? -Dijo, por lo que asentí -Oh Dios mío, estas más grande de lo que pensé -Dijo justo antes de abrazarme por lo que me extrañé.

-Disculpe ¿Lo conozco? - En mi voz se dio a notar más duda de la que en realidad tenia.

-Parece que Anne no te ha hablado mucho de tu familia -Una sonrisa amarga se dibujó en su rostro, pero rápidamente la convirtió en una sonrisa de orgullo -Yo soy tu abuelo -Cuando dijo esto el recuerdo se hizo más obvio.

Luego de saludarnos, caminamos hasta el auto y en el camino a la universidad hablamos un poco más, preguntó sobre cómo había sido mi vida estos años viviendo en California y como me sentía al volver, todas sus preguntas las respondí con gusto, y en ningún momento menciono a mi padre o madre por lo cual estuve muy agradecida.

Me dio su número de teléfono y me pidió que me mantuviera en contacto. El carro se detuvo justo en frente de un edificio que lucía antiguo, pero era muy hermoso, me despedí de mi abuelo y me baje llena de nervios. El auto se alejó y tome mis maletas, lista para entrar e instalarme.

No me tomo mucho tiempo encontrar el módulo de información, al llegar allí me encontré con una señora de avanzada edad, tenía el cabello castaño y corto, sus lentes se resbalaban por el arco de su nariz mientras escribía en el computador que se encontraba frente a ella.

-Disculpe, podría ayudarme, soy nueva y quisiera registrarme -Cuando hable sus ojos rápidamente se dirigieron a mí.

-Sí, ¿cuál es tu nombre? -Dijo con gran amargura

-Amy Anderson -Abrió sus ojos lo más que pudo e inmediato se paró de su silla y salió del modulo

-¿Amy Anderson? ¿Hija de John Anderson? -Asentí ya que estaba en lo correcto -Pequeña, todos hemos esperado con ansias tu llegada, lamento todo lo que paso, yo era muy amiga de tu papá... -La secretaria, Carol según lo decía su distintivo, no paraba de hablar y yo solo sonreía.

Cuando por fin me dijo como llegar a mi habitación, me dirigí a esta. Estaba un poco nerviosa ya que tendría que compartir habitación y como verán no es algo que acostumbre hacer.

Entré a la habitación que era muy linda a decir verdad, era bastante amplia; en ella habían dos camas, una de estas estaba ocupada por una chica de cabello castaño y piel morena, quien al verme se puso de pie

-Tu eres mi compañera de habitación -No sabría decir si fue una pregunta o una afirmación pero en su voz se notaba que no estaba muy contenta con el hecho -Esto va a ser divertido -Dijo riéndose.

-Hola, soy Amy -Le extendí mi mano pero solo me ignoro así que la baje algo incomoda.

-Ah, tu eres la de las notas perfectas que consiguió una beca -Afirmó con desagrado, creo q no le caí muy bien -Soy Camila...

-Un gusto -Me dirigí a mi parte de la habitación y me instale en esta. En menos de 24 horas me esperaba un día difícil. Mi primer día de clases... En Harvard.

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Segundo capítulo!!!

Ahdhjabd no se que decir! Gracias a todos los que leen! No tienen idea de la emoción que me causa cuando veo las visualizaciones... Espero que les guste

En multimedia Camila

Profesor de HarvardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora