Capítulo 2: Quien coño eres!

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Frase del capítulo: Lo que es tuyo siempre será tuyo, lo que no es tuyo por mas que lo pidas nunca será tuyo.
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Como? No puede ser los mismos ojos y el mismo nombre? Que quieres que muera de dolor por una ruptura?
-Esa broma no hace gracia! Quien eres, enserio. Y como sabes lo de Chava. Te manda la señora Louis verdad, pues mira vuelve y le dices que...
-Hey Hey come on tranquila. Mi madre es italiana por lo que me puso Salvatore, y sobre lo que has dicho de una tal Louis no la conozco.
Es verdad... Chava es Salvador y él es Salvatore aunque sea el mismo nombre el chico que tiene delante no sabe nada de su vida en Nueva York es imposible que quiera hacerle la vida imposible y en fin que había sido su corazón el q le estaba haciendo una mala pasada.
-Lo siento... Es Que mi ex novio se llamaba Salvador aunque tu seas Salvatore y vine aquí por eso,pensé que me estabas gastando una broma o que te había mandado su madre y... -el me miraba divertido sin interrumpirme-No se porque te cuento esto pero es que estoy agobiándome y entonces yo...me refiero que osea- y bueno por toda la vergüenza del mundo no se como me desmaye... Dios que corte! Antes de cerrar los ojos completamente escuche una risa por parte de Salvatore.

Cuando abrí los ojos notaba como un vaivén en todo mi cuerpo. Tenía una mano a mi espalda y un brazo bajo mis rodillas. Ah claro me llevaban en brazos. Eh que! Como! Me llevaban en brazos! Quien? Abrí bien mis ojos y vi aun chico desconocido, me fije mejor y recordé que era Salvatore. No percibió que desperté. Por lo que toco el timbre de su casa, salió una niña de unos 9 años.
-Hola Salvatore!
-Shhh no chilles hay una princesa durmiendo.
-Shhh- le imito la niña
-Ahora necesito que saques las llaves de mi bolsillo y me abras la puerta del castillo.
Reí en mi interior. La niña obedeció y abrió la puerta. Salvatore entro en silencio para procurar no despertarme aunque yo ya estaba despierta solo que fingía porque las ganas de andar en este momento eran nulas. Abrió una puerta blanca y me dejo sobre la cama cuidadosamente cubriéndome con la sábana azul. Cuando salió abrí los ojos rápidamente para analizar el lugar. El aroma del lugar era muy embriagador, no olía al típico perfume que se echaban los chicos sino era un olor natural muy raro en una ciudad. No le di importancia y analice el alrededor. Las paredes eran rugosas de un color azul cielo. Mientras que los muebles eran blancos como la puerta. Un gran estante de libros ocupaba una pared entera. La habitación era muy grande. En otra de las paredes halle gran cantidad de fotos en marcos blancos. En la pared opuesta de la cama se encontraba una Tv Plasma. La pared opuesta. Justo al lado de la derecha de la cama había una puerta de cristal. Seguramente era el balcón. Decidí levantarme y explorar la habitación me acerqué al escritorio que había a un lado del estante de libros y vi una Nikon y un kit completo de fotografía. Junto a ellos encontré varios álbumes. Seguramente Salvatore se dedicaba a la fotografía. Cogí uno por curiosidad, pero lo solté enseguida cuando escuche a alguien abrir la puerta. Me gire con una cara shoqueada.
-Veo que te has despierto.-se dirigió a mi con su expresión divertida de siempre.
-Si...- dije de una manera casi inaudible pero pareció oírlo. Empezó a reír y yo puse una mueca de confusión. Alguien tiraba de mis calcetines y por lo que baje la mirada. Ohhh era un bebe muy mono.
-Es Jo.
-Hola Jo- dije con una voz muy estupida, agachándome para tomarlo en brazos.-Que ojitos mas bonitosh.-Salvatore volvió a reír a lo que le dirigí una mirada fulminante. Estuvimos jugando con Jo media hora hasta que volvió a quedarse dormido.
-Y bueno cuéntame lo de tu ex.
-Mmm, eso si te ganas mi confianza. Por cierto tengo un hambre de tigre vamos a mi apartamento, mis amigos han hecho pizza.
-Vale, por el camino me cuentas.
No conteste limitándome a salir del apartamento de este. Bajamos para coger el Porsche de Salvatore.
-No dices nada sobre mi coche?
-Mmm no.
-Pensaba que las chicas amabais esas cosas materiales.
-Pues ya ves que yo no.
-A si me gusta.-se giró hacía mi y sonrió. Esa sonrisa otra vez no es que fuera arrogante ni nada por el estilo, pero me fastidiaba que me mirara todo el rato con esa expresión divertida.
Llegamos hasta el apartamento. Abrí y lo invite a pasar. Nos encontramos con un salón lleno de harina y a William y Chris besándose se giro rápidamente hacía mi dándome la cara, pensé que era porque le daba asco pero no, fue para taparme los ojos.
-Pillaros una habitación. -chilló este aun tapándome los ojos.
Escuche como pararon y me deshice de la mano de Salvatore. Los dos miraban atónitos hacía mi dirección, no mas bien hacía la espalda de Salvatore.
-Chava?-interrogo Chris.
Este al fin reacciono y se giro. La cara de Chris se torno en poker face y William saltó de alegría.
-Salvatore! Hermano cuanto tiempo!- se dirigió dando brincos. Se juntaron dándose un fuerte abrazo con unas palmadas en la espaldas. Salvatore fue el primero en separarse le agarró de los hombros y empezó a gritar como un loco.
-William que mayorrrr ya con novia y todo.- decía sacudiendo le.
-Ya..a.a.a.a pa.r.a.a.a.a....
Salvatore paro bruscamente, mientras nosotras reíamos.-Lo siento amigo. Donde esta la pizza donde?-repetí lo que dijo y me adentre en la cocina.-Pero si no la habéis metido en el horno!-grite desde la cocina.
-Nos hemos entretenido y bueno...
-Si os habéis entretenido morreando os.
-Ahora los horneamos.- chillaron al unísono. Rodé los ojos.
-Me voy a mi cuarto-anuncié.
-Subo contigo.- dijo Salvatore. Asentí y subió tras mi.
Me tiré en mi cama y saqué mi móvil comprobando mensajes.
-Puedes mirar las cosas.
-Tranquila ya lo hacía.- dijo divertido. Otra vez. Lo ignore, bueno no del todo porque lo miraba de reojo.
-Esta caja es muy bonita. El de la foto es tu novio?
Me gire atemorizada. Oh no, Salvatore acabas de cagarla vas a morir dolorosamente.
-Deja eso.- dije lo mas tranquila que pude. Él obedeció y lo dejo. Se quedo mirándome en silencio. Creando un silencio bastante incomodo. Yo había cerrado los ojos para evitar que mis ojos aguados echaran las lagrimas.
-Lo siento.
Abrí los ojos conectando mis ojos con los suyos. Joder porque tenía que tenerlos de ese color. Mis lagrimas se derramaron sin poder evitarlos por exceso de acumulación. Todas las lagrimas que acumule durante el viaje. Se acercó con una expresión triste. Me acurruco en sus brazos. Yo se lo agradecía porque era lo que necesitaba. Me acariciaba la espalda para que me calmara.
-Estas mejor?-me preguntó cuando me calmé separándome un poco para poder mirarme a los ojos.
-Si... Supongo que se me habrá pasado.
-Si quieres desahogarte puedes contar conmigo.
Asentí y empecé a contarle todo lo que me ocurrió con Chava la semejanza de sus ojos y el color del cabello.
-Entiendo. Pero quizá te dijo eso para protegerte no crees?
-Lo se, pero ni si quiera vino a despedirse sabiendo que pasaría el resto del año aquí. Estoy decepcionada y adolorida. Yo realmente creí que me quería.
-Creo que deberías hablar con él aclararle tus sentimientos. Si el te quiere que lo demuestre y si no que se arrepienta para siempre.
-Gracias Salvatore.
-Blanca, lo que es tuyo siempre será tuyo, y lo que no es tuyo nunca será tuyo.
Le di un abrazo que le sorprendió pero al cual correspondió enseguida. La puerta se abrió bruscamente.
-Chicos la pizza esta lis... Interrumpo algo?
Salvatore y yo nos separamos y comenzamos a reír mientras William nos miraba con poker face.
-No, no interrumpes nada.- dijimos al unísono entre risas.

Hey capítulo dos de la parte dos😂 que poco sentido del humor tengo madre mia. Bueno hasta lue

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